25 años D.O. “Cigales”. 16. Bodegas, cuevas y lagares, patrimonio cultural. Y III

Por José María Arévalo


( Figura 13. Logo de la Asociación de Bodegas y Cuevas de Dueñas. Fuente: ABCD) (*)

Concluimos ahora el artículo “Vestigios Vitivinícolas de la D. O. Cigales: Bodegas, Cuevas y Lagares. Patrimonio Cultural de sus gentes” del que son autores V. Rincón Blas, Presidente de la Asociación de Bodegas y Cuevas de Dueñas, y los vocales de la Asociación O. Martín Caballero, R. Frías Palenzuela y A. Salas Ortega, que incluye el libro conmemorativo “La comarca vitivinícola de Cigales: viñedos, bodegas y vinos. 25 años de la D.O. Cigales”, en su apartado III, “Arte, patrimonio y herencia vitivinícola”.

Después de los apartados “Vestigios de un pasado vitivinicola en la D. O. Cigales” y “La labor de los denominados «maestros de pico» o «cueveros», concluye el artículo con un tercer apartado sobre “PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO VITIVINÍCOLA” y un subapartado “El asociacionismo como agente protector”. Vamos a verlos.

PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO VITIVINÍCOLA

“El patrimonio vitivinícola de los municipios que componen la D. O. Cigales, en cuanto a construcciones se refiere, se caracteriza por ser una arquitectura tradicional típica de la comarca, por lo tanto, es arquitectura única y peculiar. Y tal y como se indica en el Plan Nacional de Arquitectura Tradicional (2014: 7), estas construcciones surgen de la implantación de una comunidad en su territorio y que manifiestan en su diversidad y evolución su adaptación ecológica, tanto a los condicionantes y recursos naturales, como a los procesos históricos y modelos socioeconómicos que se han desarrollado en cada lugar. En el caso que nos ocupa, surgen de la labor que genera la industrialización y comercialización del vino, es la arquitectura sin arquitecto (Franco y Luis, 2005), es la arquitectura popular que la hacen las gentes del pueblo (Jiménez-Landi, 1985), íntimamente relacionada con la tierra y los modos de actuación en el cultivo de la vid y la elaboración del vino. Convirtiéndose en señas de identidad culturales de la comarca.
La acusada vulnerabilidad que tienen este tipo de arquitecturas y que están perdiendo el arraigo que tenían. La pérdida de la sabiduría y del conocimiento tradicional de los oficios vinculados a este tipo de construcciones. La falta de sensibilización y de valoración que existe con respecto a este patrimonio, y que es importante para que propietarios y usuarios, y la sociedad en general, valoren y se sensibilicen con el mismo; hacen necesario su defensa, por tanto, aplicar la legislación vigente, Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español (BOE de 29 de junio de 1985) que viene desarrollada en el Real Decreto 111/1986, y las normas emanadas de las distintas administraciones locales, contribuirán al análisis y estudio de estas arquitecturas para poner en valor su riqueza. En definitiva, hacer posible la protección y recuperación para que puedan seguir perviviendo y sean conocidas, difundidas y disfrutadas.

Estos son, precisamente, los fines de la Asociación de Bodegas y Cuevas de Dueñas (Figura 13), erigiéndose alto protector de las Bodegas y Casas Cueva de Dueñas, es decir, un ejemplo de agente de conservación del patrimonio de la D. O. Cigales.

El asociacionismo como agente protector

La capacidad generadora de actividad protectora de las asociaciones destinadas a la puesta en valor del patrimonio, es una cuestión que no se duda. ABCO reconoce la labor de muchas asociaciones y administraciones que trabajan, en los municipios de la D. O. Cigales, a favor del patrimonio de cada uno de los pueblos, pero se echa en falta la especificidad en grupos de trabajo destinados a la defensa del patrimonio subterráneo que posee esta tierra. De ahí que ABCO lanza la propuesta de que en cada uno de los pueblos de la denominación se genere la correspondiente asociación destinada a estos términos, y por qué no, que el propio Consejo Regulador de la Denominación lance la propuesta a que dichos entes se unan en uno dentro de la denominación, en pro de una defensa de mayor fuerza del patrimonio subterráneo de las bodegas, lagares y casas cueva de la D. O. Cigales.

Activación=Conservación

La labor en el viñedo, sus paisajes, el oficio de la producción del vino y las
arquitecturas de las bodegas, lagares y casas cueva unen valores históricos de un patrimonio de siglos. Son parte importante de la realidad vitivinícola de la D. O. Cigales, son patrimonio esencial a presentar como parte de los indicadores de calidad de la producción de los Vinos Cigales. Sin embargo, las bodegas han sufrido, por un lado, el abandono de años, dada la falta de uso, lo que ha provocado su derrumbe, y por otro, la transformación en merenderos, levantándose nuevas fachadas y pequeñas casetas. Sainz (2012) resumía la situación de nuestras construcciones, indicando que por ignorancia o por falta de profesionales, no están siendo tratadas correctamente, las fachadas se pican y se recubren de cemento o se forran con ladrillo, lo que a la larga no es bueno ni para el tapial, ni para el adobe. Por tanto, la situación de nuestro patrimonio subterráneo requiere de intervención para su conservación.

El abandono derivado del desuso es posible revertirlo con la rehabilitación para nuevas dedicaciones. En definitiva, la mejor manera de preservar el patrimonio es dotándolo de usos y de activación y, por tanto, haciendo rentables las necesarias inversiones para su restauración y rehabilitación, y la de los entornos. Es una realidad que se puede apreciar en las bodegas que se encuentran en mejor estado de conservación, y que no sería descartable contemplar la posibilidad futura de rehabilitaciones integrales de envergadura que permitan recibir nuevos usos ligados a las demandas del presente. Se trata de utilizarlo como recurso para preservar este patrimonio histórico-etnográfico. Realizando diversas líneas de actuación para ejecutar en los Barrios de Bodegas, dándoles unos usos diferentes a los que tuvieron una vez y a los presentes. En la actualidad, salvo la actividad eminentemente social que tienen las bodegas, hay escasos ejemplos de otros usos como pueden ser los destinados, principalmente, a la restauración. Fernández y Carda (2014) mencionaban, como propuesta, diversas iniciativas que puedan albergar actividades que giren en torno al mundo del vino, a la vez que permitan potenciar el tejido económico y empresarial del conjunto de estos municipios. Esta propuesta estaría formada por un ecomuseo, un museo al aire libre, un festival de bodegas tradicionales, sala de exposiciones, vivero de empresas creativo-culturales, bodegas de creación, restaurante cultural, alojamientos rurales y un centro de degustación enogastronómica.

Veamos algunos ejemplos de fórmulas de usos que están sirviendo en los pueblos de la D. O. Cigales: En Cabezón de Pisuerga encontramos la Bodega Restaurante El Ciervo, una antigua bodega subterránea típica de Castilla, donde antiguamente se elaboraba el vino. Mantiene, entre otras cosas, la prensa original, lo que acredita el sumo cuidado de las instalaciones, para que los clientes puedan disfrutar de este lugar tan especial y con mucha esencia castellana. En definitiva, un restaurante con capacidad para 250 personas.

La bodega el Piñero Bodega la Sorbona de Fuensaldaña, es un restaurante bodega del siglo XIII, en el que hay cuatro comedores, el mayor con capacidad para 55 comensales. También en Fuensaldaña, el restaurante-bodega La Nieta, se encuentra en una bodega del siglo XV excavada en cuevas naturales.

En Mucientes la bodega-restaurante La Cueva, construida en 1856, que presenta 14 metros de profundidad, 1.300m2 de superficie, 9 comedores, un comedor especial para bodas y banquetes, 3 vigas prensadoras, 2 pozos de agua natural, un museo del vino, 2 cocinas independientes, y al que no la falta la necesaria plataforma salvaescaleras para personas discapacitadas o con movilidad reducida. En este municipio también encontramos la Bodega-Aula de Interpretación de Mucientes, ubicada en el Cuarto de San Pedro y que presenta 235 m2 de superficie, donde se establece un espacio didáctico y turístico, con el fin de que los visitantes conozcan al detalle los diferentes procesos de elaboración del vino, su evolución histórica, elementos y fases de construcción, sus herramientas y elaboración tradicional, gastronomía típica, mitos… Además presenta 7 paneles temáticos y recreaciones del mundo de las bodegas, que confiere al Aula de Interpretación un carácter lúdico y didáctico, adaptado a todas las edades.

En Dueñas disfrutamos del Restaurante Pecatum, antiguo Bodegón, que desde los años 70 viene funcionando. En su parte más alta presenta dos sisas en las que en la primera tiene la barra de bar y en la segunda, a su izquierda, un comedor; bajando sus 36 escaleras nos encontramos una nave de unos 60 metros de larga por 3,5 de ancha, a mitad de la nave a la derecha hay un cuarto con un horno donde se cocinaba el afamado lechazo. La gran curiosidad de esta bodega restaurante es precisamente que está ubicada en el casco urbano, a escasos 30 metros de la Iglesia de Santa María de la Asunción. Una bodega escavada en tierra que por su cercanía al pueblo era seguramente utilizada como bodega de almacén y venta del vino. También en Dueñas el Restaurante Mesón La Pala situado en Avd. Zacatín, orientado al Sur, en un cotarro arcilloso y que en un principio se debió de usar como bodega para la elaboración de vino, estuvo dedicado a bar restaurante unos 30 años, en la actualidad está en desuso, constaba de dos comedores, una zona de bar, y una entrada, además de la cocina, todo subterráneo, y en el exterior una agradable terraza.

Un claro ejemplo de la reconversión de las bodegas y cuevas en elementos dinamizadores económicos es la Bodega Remigio Salas Jalón. Un ejemplo completo de todo lo que este patrimonio puede ofrecer en cuanto a conocimiento y experiencia sensitiva: de oído, gusto, olfato, tacto y vista, es la bodega Remigio de Salas Jalón que se ha ido adaptando a los tiempos, pero que mantiene la esencia de antaño. Una bodega tradicional subterránea que data de 1738, y que dedicada a la producción y comercialización del vino, educa a sus clientes a través de las visitas guiadas que realiza por la suma de las nueve bodegas subterráneas unidas, que forman hoy la bodega, su unión se fue haciendo a lo largo de diferentes siglos para poder satisfacer las necesidades de cada momento como pudo ser el aumento de producción y la realización de mejoras en lo que a maquinaria se refiere. Hoy en día es algo atípico que una bodega de estas características continúe utilizándose para la elaboración y crianza de vino si tenemos en cuenta las facilidades y las comodidades que otras construcciones pueden aportar, sin embargo, también existen otras ventajas nada desdeñables, como son el respeto al medio ambiente, el ahorro energético y los espectaculares resultados en cuanto a lo que el envejecimiento del vino se refiere, sin olvidar el mérito que supone conservar un patrimonio vivo. Todo ello unido a los nuevos usos enoturísticos que se están llevando a cabo nos hace pensar que este tipo de construcciones tienen un gran potencial. La apertura como bodega visitable permite al visitante conocer cómo se elaboraba el vino hace siglos y cómo se elabora en la actualidad, transmitiendo un conocimiento auténtico relacionado con nuestra cultura vitivinícola.

Pero, ¿cómo medimos el éxito de la apuesta al enoturismo?, siguiendo con la Bodega Remigio de Salas Jalón como ejemplo, los datos (cedidos por Amada Salas Ortega, Gerente de la Bodega Remigio de Salas Jalón) indican que el éxito es palpable, en el año 2007 apostaron claramente por el enoturismo entendiéndose como tal la apertura de la bodega a usos turísticos. Por tanto, se da un salto entre lo que se venía haciendo hasta la fecha que incluía la producción y la venta directa de los vinos hacia las visitas guiadas por las instalaciones incluyendo degustaciones y catas comentadas. Los resultados han sido más que notables. Las visitas se han visto incrementadas en los últimos años hasta alcanzar un incremento de más de un 30 % anual. Pero no sólo se constatan resultados en cuanto al número de visitantes sino también en cuanto a la mejora en imagen de marca de los vinos, al incremento en el conocimiento de los vinos de la zona así como su historia y al conocido como efecto boca a boca. La conclusión, por tanto, es que la bodega tradicional incluida en los paquetes de oferta turística es sinónimo de éxito; sirvan de ejemplo las 1681 personas ( datos aportados por Gloria Martín Martín, Técnica de Turismo de Mucientes) que en 2015 se acercaron al Aula de Interpretación de Mucientes o las 5.500 visitas ( datos aportados por Jesús Pilar Sobejano, Técnico de Turismo de Cigales) que recibieron en Cigales con las bodegas tradicionales como reclamo turístico.

No obstante, la verdadera riqueza no radica exclusivamente en reconvertir los usos antiguos en nuevos para conservar, sino que exponer la arquitectura de nuestras bodegas, lagares y casas cueva en su estado original permitiendo al visitante vivir y sentir la cruda esencia de lo que en el pasado aconteció en nuestro patrimonio subterráneo. Por tanto, acompañando a las mencionadas e innovadoras propuestas de usos, lo que hay que lograr es que los dueños de esta riqueza patrimonial abran las puertas de los diamantes escondidos que bajo tierra poseen, y concienciar en su recuperación y conservación para su exposición, estudio y disfrute.

Emiliana Bórmida en el curso «El paisaje del viñedo: desde todas las miradas» (2011) enfatizaba la idea «de ir más allá, no sólo de ver el vino como una bebida, sino empaparse de su historia, de cómo se hace y dónde, de entenderlo como bien cultural, lo cual influirá en un incremento en la rentabilidad del vino. Hay que conseguir vender experiencias». Y nosotros decimos, que mejor manera de vender las experiencias del vino que allá donde nacía, donde dormía, donde estuvo arropado por grandes vigas de maderas que esperaban a que de su cuna, «la cocera», creciera en cuerpo y alma, para el disfrute de los que ahora invitamos a la visita. Invitar a las visitas a las Bodegas, es convidar a acercarse a la naturaleza, porque las paredes de las bodegas son naturaleza pura, oscura, con olor de humedad y frío, y gracias a las manos que primero las cavaron y después las llenaron de vid, con fragancia a vino, al vino de la D. O. Cigales. .

No olvidamos el actual uso de muchas de estas construcciones, y que creemos que gracias a ellos se han conservado muchas de ellas, el de punto de reunión y disfrute de familias y amigos, que también defendemos aquí. Alcalde (1995) decía sobre lo acogedor de la bodega, amigable y familiar, que ha desempeñado en estos últimos años una función de mentidero y senado popular, reposo y aljibe de «caldos», sin grandes pretensiones, ha sido el lugar de asamblea familiar y de novedoso divertimento de forasteros. Escasos serán los lagares que ya maceren caldos autóctonos, pero no por ello tiene que perder nuestra bodega el tradicional trajinar de hombres y mujeres, alegres joviales y hasta bulliciosos, al encuentro con un pan bregado, unos chorizos a la brasa o unas costillas de lechazo churro al sarmiento. Comer de lo nuestro, vivir de lo nuestro y en lo nuestro, ese ha de ser el sueño, que no la utopía y tampoco queremos obviar el dato de las aproximadamente 38 bodegas no comerciales, es decir el 3% de las bodegas cuantificadas, que a día de hoy producen vino para consumo particular y presumir ante las amistades de los deliciosos gustos de los caldos sin etiqueta.

Triángulo de Conservactivación ABCD

Conscientes de que la conservación del patrimonio se debe abordar en el presente para asegurar su futuro. Conocer nuestro patrimonio y la problemática que puede acarrear su conservación es fundamental para su protección. Para concienciar sobre esta cuestión es necesario que los agentes de los municipios de la D. O. Cigales, Administraciones, Consejo Regulador, la Ruta Cigales, Bodegueros, Comercio, Hostelería, propietarios y propietarias particulares de bodegas, lagares y casas cueva, etc., se activen coordinadamente.

Por tanto, la apuesta que sugiere ABCD ha de encaminarse a través del concepto de «conservactivación», que alude a la necesidad de activación sobre los procesos de conservación para revalarizar las bienes patrimaniales. Considerando, por tanto, que el mundo de vino es cultura propia debemos venderlo coma tal, y por ello necesario entrar en el triángulo de la activación cultural (Figura 14).


( Figura 14.Triangulo de Conservactivación ABCD. Elaboración propia) (*)

Se trata, en definitiva, que los agentes implicados se interrelacionen para sacar el máximo rendimiento (riqueza y conocimiento) del patrimanio subterráneo que posee la D. O. Cigales. Poner en Valor este patrimonio ha de ser uno de los primeros pasos, siempre después de realizar el necesario diagnóstico de la situación que atraviesa, tanto en el entorno, el continente, coma en los interiores, el cantenido. Por consiguiente, proteger desde la Administración can las necesarias normas que establezcan los modos de intervención y de financiación, incluir en las planes de promoción de patrimonio general el patrimonio de las bodegas, colaborando directamente con la hostelería, el camercio, los bodegueros comerciales y los propietarios particulares de las propias bodegas, lagares y casas cueva. Un triángulo de agentes que aunando esfuerzas logrará poner en relieve los valores etnográficos, culturales, históricos, enoturísticos, económicos, generación de empleo, ete., en el ámbito de la vitivinicultura que dispensan las bodegas, lagares y casas cueva que ABCD se ha empeñado en defender.


(*) Para ver las fotos que ilustran este artículo en tamaño mayor (y Control/+):
http://c1.staticflickr.com/5/4502/37788847116_d99a2081ef_b.jpg
http://c1.staticflickr.com/5/4513/37805453682_e08ceca126_b.jpg

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Tres foramontanos en Valladolid

Con el título Tres foramontanos en Valladolid, nos reunimos tres articulistas que anteriormente habíamos colaborado en prensa, y más recientemente juntos en la vallisoletana, bajo el seudónimo de “Javier Rincón”. Tras las primeras experiencias en este blog, durante más de un año quedamos dos de los tres Foramontanos, por renuncia del tercero, y a finales de 2008 hemos conseguido un sustituto de gran nivel, tanto personal como literario.

Lo más leído