Moverse en subasta

Por José María Arévalo

( Acuarela de Joseph Jzbukvic, uno de los acuarelistas más cotizados del momento, en jzbukvic.com/Home.html) (*)

En el el artículo “Invertir en arte”, en el que recogimos la reseña que facilitó WeCollect Club de la intervención de Daniel Díaz en los cursos sobre coleccionismo de arte del Museo Lázaro Galdiano, me permití recomendarles a ustedes la conferencia que dentro de este ciclo de WeCollect Club daba el propio Daniel Díaz el día 20 de diciembre, en el madrileño Museo Lázaro Galdiano, bajo el título “Moverse en subasta”, en que analizó cómo las casas de subastas llevan años registrando récords, como si fuera un sector dentro del arte que no entiende de crisis, ya que ha triplicado su facturación respecto a 2007 y que prevé un crecimiento igual o mayor al de estos últimos años.

Así que parece interesante acudir, ya que no pudimos a la conferencia, al menos a la reseña que también ha facilitado WeCollect Club, en la que señala cómo –en palabras de Daniel Díaz-, efectivamente “las casas de subastas llevan años registrando récords, uno tras otro. Parece un sector dentro del arte que no entiende de crisis. Es la ley de la oferta y la demanda. Cuando hay incertidumbres económicas, salen mejores piezas al mercado, y cuando esto ocurre se suceden los records. En estos últimos tiempos, la crisis ha hecho que muchas colecciones tengan que ser vendidas, saliendo al mercado piezas ocultas en manos privadas durante mucho tiempo. En definitiva, obras exclusivas muy atractivas también para economías emergentes como Rusia, China o los países del Golfo Pérsico, tres focos muy activos”.

Daniel Díaz, asesor en inversión en arte y subastas de WeCollect Club, es Licenciado en Historia del Arte por la UAM. Tras trabajar en subastas y galerías, funda su propio proyecto, Invertir en Arte, para la compra y venta de obras de arte. Especializado en inversión y mercado del arte, sobre todo en pintura y grabado español de la segunda mitad siglo XX y pintura española de los siglos XVII y XIX, escribe semanalmente artículos divulgativos sobre las oportunidades y ventas en el mercado nacional e internacional en la web de Ars Magazine.

¿Dónde – planteó Daniel Díaz – se alcanzan los mejores precios de las obras de arte? ¿Qué diferencias hay entre el mercado primario y el secundario? ¿Dónde es mejor comprar? ¿Qué autores se han revalorizado más en los últimos años? Son preguntas que hay que hacerse para moverse bien en una subasta.

¿Son iguales las casas de subastas nacionales que las extranjeras? Realmente se encuentran grandes oportunidades en las subastas, pero ¿qué hay que saber para comprar en una subasta? ¿Puedo pujar por debajo del precio estimado? ¿Cuánto debo pagar de comisiones e impuestos? ¿Debo superar el límite que me he puesto? ¿Conviene pedir asesoramiento antes de pujar? Estas y otras preguntas similares fueron aclaradas en este curso, impartido por Daniel Díaz.

Según este experto, el perfil del coleccionista que compra en subastas ha cambiado. Muchos coleccionistas jóvenes con poder adquisitivo buscan comprar piezas de artistas contemporáneos suyos. Pero no todo son ventas millonarias; las casas de subastas se han adaptado a los nuevos tiempos y ofrecen ya diferentes servicios para la clase media alta. Christie’s, por ejemplo, abrió en South Kensington (Londres) una sala donde todos los días se celebran subastas con lotes de entre 3.000 y 100.000 euros. Además, han empezado a programar subastas exclusivamente online. Sotheby´s, por su parte, ha apostado por abrir S2, una galería en Londres que ofrece exposiciones mensuales enfocadas a un público que no se siente cómodo con el vertiginoso ritmo de las subastas y que necesita meditar más sus adquisiciones.

Además, las ventas privadas, la parte menos glamurosa y más confidencial de las casas de subastas, también se han multiplicado en los últimos años. Y de 374 millones de dólares de facturación en 2008, Sotheby´s ha pasado a 906 millones en 2012, lo que se ha convertido una apuesta clara.

Decidir la oferta

“Una vez hemos hecho el estudio – explicaba Daniel Díaz -, sabemos cómo es la pieza, el estado en el que está, hemos contrastado la obra con diferentes expertos y tenemos claros los gastos derivados de comprar esa obra, tenemos que preguntarnos ¿cuánto estoy dispuesto a pagar por ella? Es fundamental tenerlo muy claro antes de ir a la subasta y empezar a pujar para saber cuál es nuestro límite”. Una vez está todo claro, tenemos varias opciones:

– Pujas por escrito: Tienen preferencia sobre todas las demás pujas posteriores, de tal forma que en igualdad de condiciones la que ha llegado primero es la que se lleva la pieza. Si vamos a pujar a lo mínimo nos interesa hacer una puja por escrito; si vamos a pujar muy por encima del precio inicial, no vamos a dar la puja por escrito porque estamos metiendo una puja más innecesaria.

– Pujas por teléfono u online: Tiene su cierto riesgo por las condiciones que tengamos en cada momento de horario, cobertura, situación geográfica… pero es útil cuando la obra o el pujador está en el extranjero. La opción online tiene las mismas características salvo que la haces a través de la web, cada día más común.

– Pujas presenciales: Son diferentes según el sistema del país donde compremos. El sistema anglosajón es por estimación, si una obra aparece entre 10.000 y 15.000 dólares, la casa de subastas espera que se venda, precio final, entre esa orquilla, pero no sabemos en qué precio sale al mercado, solo lo sabes cuándo empieza la subasta. “Lo interesante de este sistema es que se puede pujar por debajo de la estimación ya que muchas veces la obra muy por debajo del precio estiamdo, muchas otras sin embargo muy por encima”. El sistema español en cambio tiene un precio de salida establecido. “Si pujas por teléfono, la casa da por supuesto que asumes ese precio mínimo que fija el catálogo. Otra cosa es que el lote salga por un precio superior porque se haya pujado antes por teléfono o internet”.


(*) Para ver la foto que ilustra este artículo en tamaño mayor (y Control/+):
https://c1.staticflickr.com/1/591/31570966553_a9331ff5ac_b.jpg

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Tres foramontanos en Valladolid

Con el título Tres foramontanos en Valladolid, nos reunimos tres articulistas que anteriormente habíamos colaborado en prensa, y más recientemente juntos en la vallisoletana, bajo el seudónimo de “Javier Rincón”. Tras las primeras experiencias en este blog, durante más de un año quedamos dos de los tres Foramontanos, por renuncia del tercero, y a finales de 2008 hemos conseguido un sustituto de gran nivel, tanto personal como literario.

Lo más leído