(PD).- «Me he sentido torero y poderoso». Estas son las palabras del diestro José Antonio Morante de la Puebla tras haber cuajado esta tarde en Sevilla una faena al quinto de arte y valor, todo en un trasteo muy firme y de pellizco que ha sido premiado con una oreja.
Morante ha añadido sobre esta gran actuación:
«Ha sido una pena que el toro se rajara. Ha tenido más problemática al final. Ha sido un toro con raza y transmisión. Me he sentido muy torero y poderoso».
Sobre su anterior ejemplar el sevillano ha asegurado: «Era un traguillo ponerse delante. He hecho un esfuerzo grande. Menos mal que el toro me ha avisado por el pitón izquierdo y lo he podido torear por el derecho con más tranquilidad».
Por su parte, Sebastián Castella, que no ha tenido un lote propicio (el tercero se derrumbó nada más comenzar la faena para no levantarse y el sexto no tuvo demasiada raza), explicaba tras matar al que cerró plaza:
«El toro era mansito pero parecía que tenía posibilidades. Ha sido una pena. No le pegué demasiado en varas por eso. Luego en la muleta se movió pero no ha tenido raza ninguna. Ha sido una pena lo de hoy, al tercero parece que le dio un yuyu al comienzo de la faena».
