(PD).- La Policía británica ha pedido al candidato conservador a la alcaldía de Londres, Boris Johnson, que devuelva un estuche de cigarros que se llevó de la casa del ex vicepresidente iraquí Tariq Aziz, destruida por las bombas tras la caída de Sadam Husein.
Johnson, un diputado tory con fama de extravagante, ya reconoció en 2003 que se había llevado la pitillera, pero afirmó que se trataba de un simple souvenir, según informa hoy el diario The Daily Telegraph.
Entonces, el parlamentario justificó por escrito su acción, en ese mismo periódico: «Llevarse el estuche de cigarros del depuesto número dos de un tirano también derrocado Sadam Husein) no es lo mismo que llevarse una estatua de bronce de 2.300 años de antigüedad un rey acuclillado de la dinastía acadiana».
Aunque fue en 2003 cuando se destapó el asunto, Scotland Yard no ha emprendido la investigación hasta ahora. La policía ha escrito una carta a Boris Johnson en la que le señala que ha tenido noticia de que tiene en su poder «un objeto que puede ser propiedad cultural iraquí».
Johnson, que compite por la alcaldía de Londres con el laborista Ken Livingstone, ha expresado su irritación por lo ocurrido. Según el diputado, el mes pasado se registraron en Londres más de 18.000 delitos, y la policía no ha tenido cosa mejor que hacer que escribirle esa carta.
«Lo que muestra todo esto, se queja Livingstone, es un intento concertado por parte de mis oponentes políticos de perder el tiempo sacando a relucir un artículo que escribí hace cinco años en un claro intento de sacar provecho político».
