David Beckham y su equipo, Los Angeles Galaxy, se encuentran en Hawai, donde disputan la primera edición del Panpacífico. El equipo estadounidense comenzó su participación con una derrota ante el Gamba Osaka (1-0), algo que no importó a sus miles de seguidores, fascinados con la presencia de Beckham. Cada vez que el inglés tocaba balón, los gritos de los espectadores inundaban el estadio. Tras el choque, Beckham regaló su camiseta a dos niños que presenciaron el choque en la grada. El centrocampista inglés levanta pasiones allá donde va y en la isla del Pacífico no iba a ser menos.