(PD).- ZP asegura que lo peor de la crisis ya ha pasado, pero desde la bancada popular le contestan que a estas alturas ya no se creen de la misa la mitad. La portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Soraya Sáenz de Santamaría, ha acusado al Gobierno de «ocultar» a los ciudadanos sus previsiones económicas para los próximos años y su intención de subir los impuestos durante la campaña electoral y apuntó que para los socialistas se ha convertido en una «costumbre» no decir la verdad antes de unos comicios. «Creo que van ya por la tercera».
Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, instó al principal partido de la oposición a que se deje de «hacer triquiñuelas baratas» y de actuar «a golpe de titular». En su opinión, los ‘populares’ «no están preocupados por la situación española», sino que sólo están interesados en el «botín electoral» y buscan «exclusivamente ocupar el poder cuanto antes, a costa de lo que sea y al precio que sea».
Durante la sesión de control al Gobierno, Sáenz de Santamaría se dirigió a la portavoz del Ejecutivo para reprocharle que el miércoles pasado asegurara en la Cámara Baja que «se consolidaban los primeros resultados positivos de la crisis» y dos días después anunciara «una de las peores previsiones económicas de las últimas décadas», que estiman que la recesión durará hasta el 2011 y el paro del 18% hasta el 2012.
SU PALABRA CADUCA
«Esto es lo que dura su palabra en esta Cámara, 48 horas», resaltó la portavoz del PP. En su opinión, es «una falta de respeto que el Gobierno diga «una cosa el miércoles y la contraria el viernes, del mismo modo que también lo es que siguiera «hablando de brotes verdes cuando sabía que todas las luces rojas estaban encendidas» y que «ocultara las previsiones económicas que ya estaba elaborando».
La diputada del PP defendió que para los socialistas se ha convertido en «una costumbre» no decir la verdad antes de una cita con las urnas y apuntó que «ya van por la tercera» ocasión en que «mienten».
Con todo, advirtió de que esta vez «su osadía ha ido bastante más lejos», porque «mientras en campaña anunciaban la recuperación del país, redactaban en secreto una subida de impuestos» para así «tapar el agujero de su ineficacia. «Quieren que los ciudadanos paguen con sus impuestos la incapacidad de su Gobierno para hacer frente a la crisis y esperan a que se abran las urnas para avisarles de la mala noticia», insistió.
Por todo esto, Sáenz de Santamaría preguntó a De la Vega si cree que los ciudadanos «toleran esa visión de la realidad y de la política» del Gobierno, en el que «se filtra de todo menos la verdad». Concluyó pidiendo al Gobierno que «diga la verdad, intente gobernar y no busque culpables de su derrota electoral». «Se lo voy a decir bien claro, los únicos culpables somos nosotros, de eso sí que somos responsables», señaló, entre los aplausos de su bancada.
La vicepresidenta primera respondió asegurando que el Gobierno «mira la realidad de frente», mientras que la oposición «siempre mira hacia otro lado y de reojo a las urnas», porque «su única visión es la del botín electoral». Además, defendió que los datos que ofreció el Gobierno el pasado viernes «están contrastados» y se enmarcan en el ámbito de las previsiones de toda la Unión Europea».
DE LA VEGA: LA VISIÓN REAL DEL PP ES LA DE «SU REAL GANA»
De la Vega preguntó a la diputada del PP si al hablar de «visión real» se refiere a la que su partido tiene «de sus imputados» o «de esa nueva modalidad de contrato-mitin en plaza de toros». «Eso sí que es visión real, la visión real de la nueva era Rajoy, de ese nuevo rumbo, de mociones del quiero y no puedo, la visión real de su real gana», remachó.
La ministra de la Presidencia pidió a los ‘populares’ que «se dejen de hacer triquiñuelas baratas» y se dediquen a «ocuparse de la sanidad, del trabajo y de la dependencia allí donde gobiernan».
Además, aseguró que mientras los miembros del PP están «ocupados sólo en el coqueteo electoral» y están «actuando a golpe de titular», el Gobierno «va a seguir trabajando con rigor para promover el empleo, para ayudar a la industria y para seguir creciendo» y lo va a hacer «de la mano de empresarios y trabajadores» y «con los grupos» del Congreso.
Y mientras tanto, advirtió, los miembros de la oposición «como siempre se van a quedar al margen, eso sí, poniendo siempre la zancadilla y mirando de reojo a la papeleta electoral».
«Pueden seguir, sigan como quieran, pero en términos de pedagogía democrática es un espectáculo de oposición».
Pero no sólo Sáenz de Santamaría ha acorralado al Gobierno. Rajoy, antes, se lo había dicho a Zapatero:
«Ahora que no hay elecciones, ¿van a decir la verdad?»
