(PD).- Mientras el PP ha lanzado distintos mensajes al PSOE y ha reclacado que sigue abogando por el cambio que ya prometió en campaña, el PSOE ha eludido la oferta del PP y ha dejado entrever que podría formar gobierno en solitario.
Así el PSOE ha dado vía libre a López para comenzar las negociaciones. Sin embargo, los socialistas lo tendrán más complicado tras las amenazas de los nacionalistas sobre su respaldo en el Congreso si deciden arrebatarles la Lendakaritza.
EL DÍA DESPUÉS
El día después de las elecciones en el País Vasco se ha centrado en los posibles pactos para gobernar en la Comunidad. Todos los candidatos se han lanzado ofertas para conseguir la Lendakaritza. El PSOE quiere gobernar pero no lo va a tener fácil. A esto hay que unirle que CiU y PNV, apoyos fundamentales para Zapatero en el Congreso, han amenazado con quitarle su apoyo si gobierna en Euskadi.
Ante la posibilidad de ese pacto PSE-PP, el senador nacionalista Iñaki Anasagasti, ha advertido al PSOE de que necesitan el apoyo del PNV en las Cortes Generales para reunir una mayoría y que lo perderían si López deja a Ibarreche sin la presidencia del Gobierno Vasco.
El primer paso para que Patxi López gobierne lo ha dado la ejecutiva federal del PSOE al darle carta libre para que dirija las negociaciones en el País Vasco. En público, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha mostrado su total respaldo a López y ha considerado «muy afortunada y muy correcta» su afirmación de que está legitimado para liderar un cambio en el País Vasco y el vicesecretario general, José Blanco, ha abogado por un ejecutivo «en solitario» del PSE-EE, a pesar del guante lanzado por el PP sobre un posible apoyo a los socialistas.
Zapatero ha trasladado su felicitación a sus compañeros del País Vascos, que «han sufrido mucho, han trabajado mucho, han sido generosos» y han visto cómo los ciudadanos de Euskadi «se lo han reconocido».
Como jefe del Ejecutivo, ha querido también dejar claro que el Gobierno central colaborará institucionalmente con el nuevo Gobierno de Euskadi y con el lendakari que resulte finalmente elegido. Respecto a la posibilidad de que el nuevo escenario político en el País Vasco favorezca un cambio de alianzas en el Congreso de los Diputados, donde el PSOE podría alejarse del PNV y aproximarse a CiU, Zapatero ha subrayado que desde 2004 los socialistas han demostrado su voluntad de diálogo a la hora de recabar apoyos.
Sin avanzar posibles cambios, ha recordado que los socialistas, en diferentes circunstancias y con diferentes grupos, han llegado a acuerdos diversos; «Y seguiremos trabajando en la misma dirección», ha asegurado.
Desde el PP, su presidente nacional, Mariano Rajoy, ha manifestado en Bilbao que su partido «cumplirá» lo dicho en campaña a favor del cambio en Euskadi y su presidente regional, Antonio Basagoiti, ha ratificado que están «para echar una mano y arrimar el hombro» en ese objetivo.
Rajoy ha participado esta tarde en Bilbao, junto con su homólogo en el País Vasco, Antonio Basagoiti, y otros dirigentes del partido en una reunión de la Ejecutiva regional del País Vasco en la que han analizado los resultados electorales de ayer, que dieron al PP trece parlamentarios, dos menos que los obtenidos en 2005.
En una comparecencia ante los medios en la que no se han admitido preguntas, Rajoy ha dicho que las bases del cambio político que propone su partido en Euskadi son «defender España, el País Vasco, el Estatuto, la Constitución, la lucha contra el terrorismo y la libertad».
Rajoy ha manifestado que su formación «dice la verdad, no engaña y va a mantener su posición», y ha añadido que «otros estarán dispuestos o no a producir el cambio» en Euskadi, pero «el Partido Popular, sí», ha enfatizado.
Asimismo, ha señalado que antes de las elecciones vascas el PP ya dijo que «quería un cambio», y los votantes populares, ha destacado, deben tener «la absoluta certeza» de que el PP «no les va a defraudar».
«No somos unos mequetrefes», ha indicado, porque «lo que hemos dicho lo mantenemos, y el PP tendrá sus defectos, pero nadie puede negar sus coherencia, y lo que dice que va a hacer, lo hace si puede», ha valorado.
Además, el líder popular ha calificado como «un avance muy importante en la lucha contra el terrorismo» que «por primera vez en la historia, ni ETA ni ninguna de sus franquicias están en el Parlamento vasco».
Por su parte, Basagoiti ha señalado que su formación será «determinante en la política vasca y en el futuro del próximo Gobierno vasco», y ha asegurado que, «si el PSE no nos ha mentido y está por el cambio», los integrantes del PP estarán dispuestos a «echar una mano y arrimar el hombro».
El presidente del PP vasco ha destacado que está preparado para «empujar el barco del cambio político en defensa de la Constitución y el Estatuto».
Ha remarcado que el PP «es muy consciente de su papel a partir de ahora», y ha asegurado que, «si decimos que queremos el cambio, lo vamos a ejecutar» porque el PP es una partido «de fiar» y que «no va a hacer nada raro».
Para Basagoiti, el PP ha superado en las elecciones vascas «todas las dificultades» como «la polarización de la campaña, los asuntos internos que hemos tenido en el pasado, y las encuestas, que nos daban menos de lo que hemos sacado».
