(PD).- Los jueces y los secretarios judiciales han realizado un paro este martes para protestar por las consecuencias que el «caso Mari Luz» ha tenido para la secretaria judicial del Juzgado sevillano que no ejecutó la sentencia que condenaba al presunto autor de la muerte de la niña de Huelva y por las que puede tener para el juez Rafael Tirado, al que, de momento, se ha sancionado con 1.500 euros.
Los secretarios judiciales han desarrollado una huelga de tres horas -entre las 10:00 y las 13:00- para rechazar la sanción de dos años de empleo y sueldo que el Ministerio de Justicia impuso a su compañera Juana Gálvez, al considerar que el departamento que dirige Mariano Fernández Bermejo la ha utilizado como «cabeza de turco» para ocultar las carencias de la Administración de Justicia.
En un comunicado leído en las concentraciones que se han celebrado en todo el país han pedido una reforma urgente de la Justicia en España. En opinión de los secretarios judiciales con la modernización del sistema judicial, la modificación de las leyes procesales y la creación de una nueva oficina judicial se solucionarían los problemas de los que adolece la Justicia.
Las concentraciones a las puertas de los Juzgados se han celebrado en todo el país. En Sevilla, epicentro de la protesta por tratarse del Juzgado donde trabaja la secretaria sancionada, se ha celebrado un acto de protesta al que ha asistido la propia Gálvez. La secretaria sancionada ha manifestado que se encuentra mal, pero que se siente arropada por sus compañeros.
Piden la dimisión de Bermejo que asegura que «nadie es intocable»
En las diferentes concentraciones, donde se han anunciado nuevos actos de protesta en noviembre, se ha pedido la dimisión del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo. Éste, por su parte, ha señalado que «si alguien pretende ser intocable, no lo va a conseguir». A su juicio, con esta protesta, que ha calificado de «movimiento corporativo difícilmente explicable» sólo se pretende presionar al CGPJ para que no cambie la sanción al juez Tirado.
En Madrid, decenas de secretarios judiciales de los Juzgados de Instrucción de la capital y de la sede principal de los Juzgados de Primera Instancia de la capital han secundado este acto de protesta. Se han concentrado ante las fachadas de ambos edificios. El paro se ha respaldado por un 80% de los trabajadores, según los primeros datos de las dos asociaciones convocantes, el Colegio Nacional de Secretarios Judiciales (CNSJ) y la Unión Progresista de Secretarios Judiciales (UPSJ).
Los más de sesenta secretarios judiciales destinados en el Tribunal Supremo y en la Audiencia Nacional también han secundado masivamente el paro, tal y como han asegurado fuentes de ambos órganos judiciales, que no obstante han señalado que los dos tribunales han seguido funcionando «con absoluta normalidad».
