(PD).- Mientras Rosa Diez «buscaba unos documentos para preparar una conferencia, me encontré un viejo cuaderno de esos que yo suelo llevar en el bolso para escribir las cosas que se me ocurren mientras viajo«. «Encontré lo que supongo que fue el borrador de un artículo…» Y la diputado de UPyD ha decidido publicarlo en su blog, «para que no se me olvide que no se me puede olvidar«.
Rosa Díez escribe en su blog un magnífico artículo que titula «Hay un lugar de España» que dice:
«. Hay un lugar de España en el que la gente sale a la calle a gritar libertad.
. Un lugar de España en el que los jóvenes aún se manifiestan para defender los valores de la igualdad y la pluralidad.
. Hay un lugar de España en el que el derecho a la vida sigue siendo una aspiración.
. Hay un lugar de España en el que no todos los ciudadanos son considerados iguales ante la ley.
. Hay un lugar de España en el que los políticos de la oposición al gobierno son perseguidos, amenazados y asesinados por defender sus ideas.
. Hay un lugar de España en el que hay mujeres que han parido hijos huérfanos como consecuencia del terrorismo.
. Hay un lugar de España en el que muchos ciudadanos no pueden votar a quien quisieran; porque algunas personas no pueden presentarse a las elecciones sin poner en riesgo su vida.
. Hay un lugar de España en el que hay personas que dan clase escoltadas por policías.
. Hay un lugar de España en el que el sesenta por ciento de los ciudadanos no se atreve a hablar en público de política.
. Hay un lugar de España en el que los policías les dicen a sus hijos que mientan sobre la profesión de sus padres para evitar que pierdan sus amigos.
. Hay un lugar de España en el que en algunas iglesias se leen los domingos discursos que equiparan a las víctimas y a los verdugos.
. Hay un lugar de España en el que cuando un asesino vuelve a casa en libertad le reciben con pancartas de exaltación y bienvenida.
. Hay un lugar de España en el que las víctimas son consideradas molestas por los gobernantes.
. Hay un lugar de España en el que la libre determinación (el derecho a decidir le llaman ellos) la reivindican los opresores.
. Hay un lugar de España en el que los que gobiernan se creen con derecho darte el carné de ciudadano.
. Hay un lugar de España en el que el derecho a la libre expresión no está garantizado y ejercerlo supone arriesgarte a persecución o muerte.
. Hay un lugar de España en el que los niños aprenden en algunas escuelas a odiar a quienes no piensan como ellos. Les han enseñado que son diferentes y tienen derechos históricos que no tienen los demás.
. Hay un lugar de España en el que los adultos dan sprays a algunos niños para que pinten dianas con el nombre de otros niños.
. Hay un lugar de España en el que decenas de personas hacen el mismo gesto al salir de casa: miran debajo de su coche por ver si hay una bomba.
Ese lugar se llama Euskadi. Tiene una de las mayores rentas per cápita de España. Tiene alguno de los mejores restaurantes, de los mejores museos, de las mejores carreteras, de los mejores hospitales, de los mejores comercios, de los mejores hoteles.
A pesar de tener una de las mayores expectativas de vida y uno de los menores índices de mortandad infantil, la gente se va. Porque sigue habiendo exiliados políticos de esa parte de España. Muchos no se van porque no pueden; y otros se quedan por compromiso político. Pero su censo poblacional ha disminuido un diez por ciento en los últimos diez años. Y otros muchos siguen haciendo como que no pasa nada; se cruzan por la calle con la gente escoltada y parecen ser ciegos; o prefieren aparentar que los escoltados son transparentes…».
Y concluye la valiente diputada vasca:
Aquí está. Para que no se me olvide que no se me debe olvidar.
