(PD).- El ex responsable de relaciones internacionales del PNV Gorka Agirre declara este viernes ante el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón como imputado en la causa que investiga el aparato de extorsión de ETA.
Un antiguo responsable de la lucha contra ETA en Francia, Joel Catalá, ha remitido una carta al juez Garzón defendiendo al ex responsable de Relaciones Internacionales del PNV. El comisario francés ha reconocido que la carta que envía a Garzón es inusual, pero sostiene que ha meditado mucho la conveniencia de hacerle saber al magistrado la valía personal y profesional de Gorka Agirre. De hecho el comisario Joel Catalá se compromete a demostrar la moral de Agirre y se pone a disposición del magistrado.
Esta citación, que fue solicitada por los abogados de Agirre, se completará con la comparecencia ante Garzón, el próximo 19 de mayo, del actual presidente del PNV, íñigo Urkullu, del dirigente de esta formación en Guipúzcoa Joseba Egibar y del ex presidente nacionalista Xabier Arzalluz, que declararán ante el magistrado en calidad de testigos. En julio de 2006, el juez Garzón imputó a Agirre un delito de colaboración con organización terrorista por su presunta labor como intermediario entre empresarios vascos y ETA en el cobro del «impuesto revolucionario», y le impuso una fianza de 12.000 euros.
De hecho, según señalaron fuentes de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, las comparecencias solicitadas por la defensa de Agirre pretenden conseguir que el juez revise la situación procesal del ex responsable dirigente del PNV y revoque su condición de imputado.
Las fuentes consultadas explicaron que es difícil que su parecer sobre la implicación de Agirre en la causa varíe con el contenido de las declaraciones de sus compañeros de partido.
Todas estas comparecencias se producen en el marco de la investigación que Garzón lleva a cabo desde 2006 sobre el envío de cartas de extorsión por parte de ETA a empresarios vascos y el cobro del «impuesto revolucionario» en el bar «Faisán» de Irún (Guipúzcoa).
Además de este sumario, Garzón instruye otras dos causas relacionadas con el aparato de extorsión de ETA, una que investiga las cuentas bancarias que el dueño del bar «Faisán», Joseba Elosua, tiene en paraísos fiscales europeos y otra que indaga el presunto chivatazo policial que alertó de la operación que se iba a llevar a cabo en el citado bar.
