Una treintena de cargos del PP se «amotina» y crea una nueva corriente

(PD).- Ni Rajoy ni Sáenz de Santamaría han conseguido serenar los ánimos de algunos diputados y senadores. Tal es el malestar que ha surgido un grupo organizado que tantea como líder a Zaplana.

Que algo se está cocinando de puertas para adentro en el Partido Popular es indudable. Especialmente entre los diputados que conforman el Grupo Parlamentario que dirige Soraya Sáenz de Santamaría. A muchos no les gusta el cariz que están tomando los acontecimientos, sobre todo después de la designación de la vallisoletana como portavoz en el Congreso y del resto de nombramientos en la Dirección.

Las quejas han llegado a tal magnitud que ni Sáenz de Santamaría consigue acallarlas, a pesar de que para calmar el patio está intentando contentar a todos mediante el reparto de los puestos en las mesas y las portavocías de las comisiones.

Este periódico informaba la semana pasada de que el diputado por Toledo Alejandro Ballestero estaba moviendo sus hilos para intentar sublevar a lo que él llama La generación perdida: la que intermedia entre la de José María Aznar y la de Sáenz de Santamaría. Aunque sin demasiados resultados. Es más, algunos de los diputados que sondeó le traicionaron y el aparato del partido acabó enterándose de sus movimientos.

Pero hay más conatos de levantamiento en los sótanos del PP. La revista Época publica en su última edición un reportaje titulado Nace la «Tercera vía» del PP en el que el periodista Miguel Gil desvela la existencia de una nueva «corriente de opinión» en el seno del partido. No tienen un líder ni tampoco intención de presentar una candidatura alternativa a la de Mariano Rajoy en el Congreso Nacional de junio, pero ya son más de 30 dirigentes del partido los que la integran: entre diputados, senadores y cargos provinciales. Eso sí, no forman un «grupo estable» ni han adquirido «compromisos inquebrantables», relata la información.

¿Quiénes están detrás?

Entre las caras conocidas que figuran a la cabeza de esta Tercera vía están Ana Torme y Vicente Martínez-Pujalte, parlamentarios por Valladolid y Murcia, respectivamente. Se da la circunstancia de que ambos formaban parte de la Dirección del Grupo Parlamentario la pasada legislatura (encabezada por Eduardo Zaplana) y en ésta Rajoy y Sáenz de Santamaría les han relegado a un lugar mucho más discreto. Ello explicaría su malestar.

Junto a Torme y Martínez-Pujalte Época da los nombres de la alcaldesa de Ciudad Real y presidenta del PP provincial, Rosa Romero; el diputado zaragozano Ramón Moreno; y el alcalde de Guadalajara y presidente del PP provincial, Antonio Román. Han contactado con otros para que se sumen a sus tesis y han puesto especial empeño en conseguir la «complicidad» de Zaplana. No en vano, Martínez-Pujalte es uno de sus hombres de confianza.

Este grupo más o menos conformado apuesta por una «urgente democratización interna» y un Congreso que realmente dé con la clave para ganar las elecciones generales de 2012.

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