Laura G. Orihuela y Erea S. Garró (PD).- «Sabemos que va a ser complicado hacer política dentro del grupo mixto, pero no eran menos las dificultades que hemos tenido para presentarnos como partido». Son la palabras de Rosa Díez en la primera rueda de prensa después de que UPyD ganase un escaño en el Parlamento.
Tras haber pasado la prueba de las elecciones, UPyD, confía más que nunca en sus ideas y en el sentido común.
Estamos convencidos de que la mayoría de los ciudadanos, independientemente de a quién hayan votado, están a favor de las ideas de UPyD.
La cabeza visible del partido asegura no tener miedo al aislamiento dentro del grupo mixto. Además, promete mirar las iniciativas, no a quienes las proponen.
No vamos a hacer un cinturón sanitario a nadie. Buscaremos dos grandes pactos de Estado, uno para luchar en contra de la ley antiterrorista y otro para lograr la igualdad territorial.
Plantea así, desde la reforma de la ley electoral hasta una revisión de competencias de las autonomías.
¿DE DÓNDE HAN VENIDO LOS VOTOS?
Independientemente de lo que puedan decir los análisis de los diferentes medios, Díez afirma contundentemente que los votos conseguidos «han venido de casa, de cada ciudadano libre, independiente y optimista que ha votado a UPyD».
Así, asegura no «haber robado» votos a nadie, sino cubrir una necesidad, un vacío que no estaba ocupado. «Hemos colado una piragua entre dos portaaviones».
Viendo lo visto, tras convertirse en el quinta partido más votado, el próximo reto de este partido, que se autodefine como «laico, progresista y trasversal», será presentar su candidatura en las elecciones autonómicas y municipales. Y es que «esto no ha hecho más que empezar».
