(Agencias / PD).- El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha reconocido que la previsión que hizo hace justo un año, en víspera del atentado de Barajas, sobre cómo evolucionaría el proceso de diálogo con ETA y la gestión del AVE a Barcelona han sido sus principales errores durante la legislatura.
No obstante, el presidente ha hecho un balance positivo de la Legislatura y ha asegurado que durante la misma se ha registrado un crecimiento económico intenso, se ha creado empleo como en ninguna otra, se ha vivido el período más fértil de paz social y se han subido las pensiones mínimas hasta un 30 por ciento.
El presidente ha considerado que España sale «fortalecida», en la que ha considerado que el país ha experimentado un «importante cambio» que se ha reflejado, sobre todo, en las condiciones de vida de los ciudadanos. El crecimiento económico, la creación de empleo, el desarrollo de políticas sociales y la apuesta por el futuro, con inversiones en educación e innovación, han sido los principales aspectos destacados por Zapatero como balance de sus cuatro años de Gobierno durante la rueda de prensa posterior al último Consejo de Ministros del año.
Tras reconocer que en la legislatura ha habido «momentos de tensión», el jefe del Ejecutivo ha explicado que su Gobierno ha cumplido su programa electoral y, al igual que comenzó la Legislatura cumpliendo el compromiso de retirar las tropas de Iraq, lo cierra elevando el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 600 euros mensuales.
El jefe del Ejecutivo ha confesado que su previsión sobre la paz y la gestión del AVE en Barcelona han sido los dos errores «más notables», ha admitido «alguno más», aunque no ha visto necesario «excederse» a la hora de enumerarlos.
«Error notable» con ETA
Ha comenzado citando la equivocación que supuso decir un día antes del atentado de ETA de la T-4 el pasado 30 de diciembre, que costó la vida a dos ciudadanos ecuatorianos, que «dentro de un año estaremos mejor que hoy» en la búsqueda del fin de la violencia. Zapatero ha recordado que ya expresó con «la máxima deferencia y solemnidad en el Parlamento» que fue un «error, evidentemente notable».
Asimismo, Zapatero ha expresado su total determinación para llevar a cabo una política que reduzca al máximo la capacidad operativa de ETA y «abra el camino para el fin del terror y del horror», y ha dicho que no hay expectativa de diálogo con la banda.
Según ha explicado, en esta legislatura ha trabajado todos los días, como primer deber democrático, para acabar o reducir al máximo la violencia terrorista y ha afirmado que en esta tarea «lo único» que no estaba en su pensamiento, ni está ni estará nunca es «cualquier cálculo personal o político». Según Zapatero, el primer deber de un presidente del Gobierno es «intentar salvar vidas, eliminar la violencia, el terror y el asesinato, el chantaje, las bombas, de la vida colectiva», y los ciudadanos tienen que hacer la valoración de cómo el Gobierno ha intentado acabar con la violencia o reducirla y «cómo han estado otros en su comportamiento».
El presidente, en el turno de preguntas, se ha remitido al debate electoral para hacer balance de la legislatura en materia antiterrorista y ha explicado que no había incorporado este asunto a su exposición en coherencia con su actitud de dejar fuera de la contienda política la lucha contra el terrorismo.
«Un gobierno desea tener el apoyo de todos los partidos en la lucha antiterrorista», ha explicado Zapatero, quien ha recordado que él lo dio cuando estuvo en la oposición «sin pedir nada a cambio», apoyo que ha deseado para todo presidente del Gobierno porque «es bueno para la lucha antiterrorista y es bueno para el país». Que la actitud de unidad y consenso en esta materia sea efectiva -ha insistido- depende mucho de la tarea y la actitud de la oposición».
A continuación, se ha referido al AVE a Barcelona y ha apuntado que el Gobierno también reconoció «la asunción de su responsabilidad y el error» llevado a cabo en la ejecución de las obras. Ha insistido en que la admisión de fallos y la autocrítica en la labor del Gobierno es algo que «no tiene muchos precedentes» en España, aunque ha opinado que es un hábito «sano» y que «no cuesta». «Es justo que los ciudadanos tengan el derecho a que cuando ha habido un error por parte del Gobierno o de un Ministerio, se reconozca, se pidan disculpas y se tenga la voluntad de intentar que no vuelva a pasar», ha declarado.
No hay fecha para el AVE en Barcelona
Zapatero no quiso dar hoy una fecha exacta de la llegada del AVE a Barcelona, y destacó que se realizará cuando «de manera natural» se acaben las obras. El presidente indicó que el AVE llegará a la Ciudad Condal cuando «se terminen las obras y se compruebe por parte de ADIF y RENFE la tareas que les están «encomendadas».
Preguntado por la reprobación de la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, por parte del Senado, y su posible cese, Zapatero afirmó que «no me he planteado su cese, que es algo absurdo, y más en estos tiempos».
A la hora de resumir sus mejores momentos en estos cuatro años, se ha limitado a manifestar su «profundísimo agradecimiento, inmenso, pleno, total, absoluto», a los ciudadanos que le dieron la confianza en marzo de 2004 para dirigir el Gobierno.
Perspectiva para valorar las reformas estatutarias
Zapatero reconoció que las reformas estatutarias emprendidas en esta legislatura fueron «polémicas, discutidas» y generaron «momentos de tensión», pero consideró que sus efectos positivos se apreciarán cuando se contemplen con cierta perspectiva. Zapatero se refirió así a las reformas aprobadas de los estatutos de Andalucía, Aragón, Castilla y León, Catalunya, Comunidad Valenciana y Baleares.
Zapatero subrayó que había cumplido su compromiso de reforma de estatutos, también el de Catalunya, y se mostró convencido de que «cuando llegue el sosiego», cuando las reforma del Estatuto catalán se vea aplicadas, «y sus concreciones se produzcan, veremos que contribuirá a mejorar el autogobierno de Catalunya».
Preguntado en concreto sobre la reforma del Estatuto catalán, Zapatero aseguró que la voluntad de diálogo con la Generalitat de Cataluña para que el Estatuto despliegue sus efectos «es continua».
En su opinión, la visión constitucional del Estado de las autonomías «está bien recogida en las reformas estatutarias, y en la jurisprudencia del TC, que en última instancia es la voz que modula el reparto del poder entre el Estado y las comunidades». Además, Zapatero recordó que la vocación de diálogo entre las tres administraciones había repercutido en un descenso de la conflictividad ante el Constitucional.
Aspira a una mayoría más amplia
Zapatero afirmó que, de cara a las elecciones del 9 de marzo, el Partido Socialista «aspira a una mayoría más amplia», si bien consideró «conveniente» que los dos grandes partidos tengan un «diálogo razonable» con el PNV y con CiU.
No obstante, Zapatero pidió prudencia a la hora de hacer valoraciones sobre formaciones políticas y líderes «cuando hay unos comicios cerca». Zapatero descartó que tenga pensado que alguna de estas dos formaciones vaya a formar parte del nuevo Gobierno ya que «lo primero es la cita del 9 de marzo».
Sobre la vinculación ANV-Batasuna
Sobre la situación en Euskadi, el presidente ha garantizado, en referencia a Acción Nacionalista Vasca (ANV), que «si alguien vulnera o ha vulnerado la ley no podrá disfrutar de los derechos que la ley otorga para la participación política».
Sobre Acción Nacionalista Vasca, Zapatero ha destacado la investigación «exhaustiva» que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) están haciendo sobre la posible vinculación de ANV con la ilegalizada Batasuna. Esta investigación, ha dicho, tiene una sede judicial «y va a tener la referencia de la Fiscalía General del Estado y la Abogacía del Estado».
Zapatero ha expresado su plena confianza en las instituciones del Estado de Derecho que son las que garantizan el cumplimiento de la ley y que, ha recordado, actúan con respeto a los plazos y al trabajo de las FCSE. «Nadie va a estar fuera de la ley», ha dicho el presidente, quien ha recordado que los mecanismos del Estado de Derecho funcionan.
Crecimiento económico y superávit
En el plano económico, Zapatero ha afirmado que las cuentas públicas cerrarán 2007 con un superávit de «al menos» el 1,8 por ciento del PIB, porcentaje que superaría en cinco décimas a la previsión inicial del 1,3 por ciento. Este dato, junto con el superávit alcanzado durante toda la legislatura, contrasta con el déficit del 0,35 por ciento del PIB con el que cerró el ejercicio 2003.
Según el presidente del Gobierno, en estos cuatro años la economía ha crecido una media del 3,7 por ciento, algo que no ha logrado ningún país desarrollado y destacó el aumento del PIB en 2007 en el 3,8 por ciento. Zapatero ha señalado también el incremento del 11,2 por ciento en la inversión en bienes de equipo y el aumento del 8 por ciento en las exportaciones. También ha incidido en que la tasa de empleo haya alcanzado el 66 por ciento de la población activa, en que haya veinte millones de ocupados y en que la productividad crezca el 0,8 por ciento.
Inflación alta hasta primavera
No obstante, el presidente ha afirmado que la inflación mantendrá «un nivel alto hasta el inicio de la primavera» y ha recordado que este aumento de los precios «no es fruto de una acción del Gobierno, sino de una subida fuerte del petróleo y de los alimentos». Zapatero ha destacado que estos incrementos de precios es consecuencia «de una escasez en la oferta y de un aumento en la demanda en determinadas regiones del mundo, que por su progreso se incorporan al consumo».
El presidente ha subrayado que durante la pasada legislatura la inflación superó en cinco ocasiones el 4 por ciento y recordó que España siempre ha tenido una tendencia superior a la media europea.
Ha admitido que este incremento de la inflación afecta al poder adquisitivo de las rentas más bajas, por lo que ha mostrado su «preocupación» por ello, si bien ha recordado que para combatir esta circunstancia el Gobierno ha incrementado las pensiones mínimas y el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) En este sentido, ha incidido en que la renta per cápita de los españoles ha aumentado «considerablemente» hasta reducirse diferencias importantes con otros países y adelantando a Italia.
Ayudas a la natalidad
Zapatero valoró el cambio que se ha producido desde 2004 en materia de apoyo a la natalidad y a la conciliación de la vida laboral y familiar.
Así, argumentó que un total de 159.000 familias han percibido ya la ayuda de 2.500 euros por nacimiento de un hijo promovida por el Gobierno, reveló hoy el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, quien destacó también que más de 170.000 padres han disfrutado del permiso de paternidad de quince días.
No cambiar la Ley del aborto
Por otro lado, el Presidente consideró que no hay razones suficientes que avalen una reforma de la Ley del Aborto ni tampoco el consenso social oportuno para ello, lo que no quiere decir que no se vayan a dar esas condiciones en el futuro.
Tampoco se da el consenso social en torno a esa reforma, ha añadido el presidente, para quien hacer esta apreciación no equivale a decir que «no se hará nunca, pero al día de hoy, no hay razones, si bien siempre estamos abiertos a una reflexión en ese sentido».
