(PD/Época).- La fundación que preside, Concordia, ha puesto en marcha con otras plataformas cívicas (Convivencia Cívica Catalana, Foro de Ermua, Papeles de Ermua, Denaes) la iniciativa Por la concordia nacional y la reforma constitucional, cuyo nombre lo dice -casi- todo.
En una entrevista para la revista Época, Aleix Vidal Quadras, asegura que es necesaria una reforma constitucional «para que España no quede al abrigo de las amenazas disgregadoras de los nacionalistas».
El Estatut ha vulnerado de forma fraudulenta la Constitución, lo cual demuestra que ésta tiene fragilidades, flancos débiles, vías de agua que hay que taponar. De ahí lo ineludible de la reforma.
Cree que es es necesaria una reforma fiscal, educativa y otra del sistema de I+D+i «para que España sea competitiva en la economía global»; y suprimir la distinción entre «nacionalidades» y «regiones».
No tiene ningún efecto práctico y sólo crea confusión. Esas dos categorías, que aparecen al principio de la Constitución, no vuelven a figurar en el texto. Están ahí como pegotes superfluos.
Reforma de la Constitución
Asegura que en privado, muchos dirigentes socialistas abogan por un gran acuerdo PP-PSOE y la reforma de la Constitución como «única salida al caos que nos ha metido Zapatero».
Porque criticar a la dirección de un partido cuando se está en el Gobierno pone en riesgo la victoria electoral y el disfrute del poder. Lo contrario sería tanto como pretender que la moral está por encima de la política. Y eso es algo que se puede soñar, pero no pretender.
