Juan Cruz osta (PD).- Mario Rajoy le ha exigido que esté a la altura del «desafío al Estado» por parte de Ibarretxe. El presidente le ha replicado que «hemos dado una respuesta en todo momento con prudencia y con serenidad«. Según Zapatero, el referéndum tiene el mismo sino que el Plan Ibarretxe. Eso sí, la respuesta será «tranquila«. Rajoy ha torcido el morro con preocupación: «Atravesamos un momento delicado«.
Muy en su línea, el presidente del Gobierno ha afirmado que si Rajoy fuera hoy presidente y el PSOE estuviera en la oposición, habría tenido su apoyo «para aplicar la ley y rechazar esa consulta».
El referéndum de Ibarretxe previsto para octubre del año 2008 ha sido el armazón de la tarde:
«Atravesamos un momento delicado del que usted y su forma de gobernar no es ajeno».
Ha dicho un cada vez más rejuvenecido en su indumentaria Rajoy que todo está pasando «por su imprudencia«.
«Se le han ido las cosas de las manos. Todo esto pasa porque usted llegó diciendo que la Nación española es una cosa discutida y discutible».
El presidente del PP, además, cree que lo grave es que «usted no acierta a comprender la gravedad de lo que ha hecho hasta ahora«.
«La mayoría de los españoles quieren ver a un presidente del Gobierno que diera tranquilidad al pueblo español y no uno que no sea capaz de destejer lo que otros han hecho posible después de estos años de democria».
Zapatero ha acusado al Partido Popular de tener mala intención.
«La propuesta se formuló hace siete años. En ese momento yo no era Presidente del Gobierno. Se formuló la propuesta diez días después de que ustedes ganaran por mayoría absoluta».
El presidente ha asegurado que, de «una manera tranquila«, el Congreso dará a la consulta propuesta por Ibarretxe «el mismo destino» que el Plan Ibarretxe, «con los votos y con los argumentos«.
Al contrario que Rajoy, Zapatero con su nuevo look sobrio, ha contestado: «Hemos dado una respuesta en todo momento con producencia y con serenidad«.
Y ha dicho más: «Las instituciones democráticas no deben tener ningún temor, el que debe tener temor es el que no cumple la legalidad«.
Ha respondido a esto Ángel Acebes:
«Es la primera vez que se plantea un referéndum a fecha fija y además diciendo que no importa la legalidad».
A partir de aquí ha sido Pedro Solbes el que se ha enfrentado con Ángel Acebes y Eduardo Zaplana. La vicepresidenta, lástima, estaba de periplo por Bruselas.
El tercer azote del PP, además, ha aprovechado que el cara a cara fuera con el ministro de Economía para decir:
«Usted ha intentado pasar lo más desapercibido posible en esta legislatura. Hace unos días, tal vez, para eludir su responsabilidad, usted se atrevió a criticar la herencia recibida. Nosotros tuvimos que pedir créditos a los bancos para poder pagar las pensiones».
Y el Solbes de 1995 ha contestado:
«No se quejen ustedes de la herencia recibida».
