Labriegos de utopía y desde el pueblo
de la necesidad y la palabra
al fin encuadernada entre los suyos
verdadera y más honda que la vida.
El recuerdo tenaz desestimando
inadvertido lo real presente
intenso y observado que transita
lo inmaterial del manto elemental.

Es sensación y relevo inmediato
al clamor perezoso vislumbrado
una vez horizonte no abreviado
dentro del contrapunto condensado
en la medida nueva itinerante
y difiere un agosto engalanado
distinto rechazado agradecido
cuando al fin finalizan esos días.

Son pocas las fundidas paralelas
conservando costumbres relegadas
de influyentes chumberas contenidas
en las profundidades de figura
que en la posición viva se construye
el espacio invertido y contundente
de otra linde desértica amarilla
dormida en mezcla viaja y la contiene.

José Pómez