La impresión arbolada del jumento.
Cuando la vida llega se aproxima
con su belleza blanca y secuencial
los vientos ceden y las rosas se abren
y el jardín se sosiega con los pájaros.
Quiero un verso de vida que te lleve
hoy a ser un viajero deslumbrante
sin tantos imprecisos de recuerdos
más extraños oscuros y acuñados.
Y prende la carrera y además,
cuenta el final desde esa amanecida
hasta el comienzo frío y arraigado
a la insensatez doble en la jornada.
Con otra apasionada del camino
palidece el granito como herido
hasta empapado en lágrimas del mundo
y ahogar acaso mirara esquiva.
Y a través del silencio detenido
enfriar el pabellón de la coraza
y sentir con el peso de la lana
la dimensión sentada en el pasillo.
Rocas de besos y asnos de salinas
junto a los que me encuentro alineado
en cuerpo y alma y por ello animada
mi mano escribe que quiere escucharte.
José Pómez
http://pomez.net