Con la mente aritmética

Sucede trabajando sobre el verde y el agua
me dices que le llame ese fondo desvelado
el impropio inventado e interminable y caro
la complicada esfera de las casualidades.

Ver tu rostro que mira así destino de mi alma
cuando la suerte sueña y los sentidos no mienten
por temor a la noche del tendido incansable
por amor desmedido que tu alma siempre tiene.

Advertir a los años plenos de las baladas
de las trabas del hambre y de sus preclaros dueños
ser una breve tarde desierta de rumores
al convertir tu imagen libre en mi sentimiento.

Repite una alegría a cada insensato instante
y como una huerta ampara sin nada de reserva
a todos los prodigios leales y constantes
en la inclinada loma de los puros afanes.

Comprobar que los días son galgos campeones
decir que nos queremos y cómo nos queremos
en recuerdo admirado de loma cristalina
tocar la mano presa de viento esclava en nube.

José Pómez
http://pomez.net