(EFE / PD).- El presidente de la comisión de Peticiones del Parlamento Europeo (PE), el polaco Marcin Libicki, ha admitido la demanda para investigar los motivos por los que la Generalitat catalana no renovó en 1998 las frecuencias de la cadena Cope en Tarragona, Manresa y Barcelona.
Fuentes de la Eurocámara han informado de la decisión de Libicki, que hizo pública mediante una carta a los grupos parlamentarios que integran dicha comisión, con lo que pone fin a cinco meses de tenso debate sobre si la demanda debía o no ser admitida.
La demanda fue presentada el pasado 24 de enero por el eurodiputado popular Luis Herrero, acompañado por otros ocho periodistas y el respaldo de 700.000 firmas de ciudadanos en favor de una investigación sobre el caso.
Los firmantes quieren «llamar la atención del PE sobre la existencia de una operación política destinada a desposeer a la segunda cadena de radio más importante de España de todas sus emisoras en Cataluña«, según el texto de la petición.
En su carta, Libicki recuerda a los grupos parlamentarios que con su demanda «los peticionarios denuncian la prohibición de la libertad de expresión y de opinión» que, según dice, son un «derecho primario de los Tratados» de la UE.
Libicki afirma además que la petición «es ciertamente admisible» por su contenido, «pero no se tomó ninguna decisión en este asunto, pese a que han pasado muchos meses y pese a que ha habido muchas discusiones durante las reuniones de la comisión y de los coordinadores» de los grupos parlamentarios.
El eurodiputado español de los Verdes David Hammerstein ha criticado que la decisión de Libicki «no valora el fondo del asunto» y ha subrayado que «la opinión mayoritaria es que no hay base para la queja porque la emisora ya tiene la licencia«, por lo que dice que es una situación de «humo y polémica«.
Hammerstein ha hecho alusión a la sentencia judicial del pasado mes de abril dictada por el Tribunal Supremo, que instaba a las autoridades catalanas a renovar la concesión de la Cope en Barcelona hasta el 2008.
Además ha apuntado que, cuando en una próxima reunión en julio o septiembre se escuche a los peticionarios de la demanda en el PE, «podría archivarse el caso porque los hechos se han evaporado«.
El eurodiputado del Partido Popular (PP) Carlos Iturgaiz ha dicho que es «una excelente noticia» que se haya admitido la petición «a pesar de las trabas socialistas y nacionalistas» para frenar la reclamación «desde el primer momento«.
Itugáiz ha afirmado que «simplemente la rechazaban porque la demanda la trajo el Partido Popular y se trataba de la Cope» y ha recordado que la decisión de Libicki «está por encima del enfrentamiento que han buscado«.
El eurodiputado socialista Miguel Angel Martínez ha calificado de «golpe de Estado» la decisión de Libicki, y ha afirmado que el presidente «violó el reglamento en dos ocasiones» para llegar a tomar su decisión, sobre la que, ha dicho, «hay mayoría para que no se admita a trámite«.
En relación a la misma, Martínez ha subrayado que se ha puesto en marcha una protesta que se hará llegar al presidente de la Eurocámara, Josep Borrell.
