(PD).- El ex secretario de Estado de Comunicación sigue de «negro» del presidente. La frase más resultona y exitosa del último Debate del estado de la Nación es suya.
Revela El Semanaldigital que en círculos cercanos al Gobierno y al propio PSOE viene siendo motivo de continuos comentarios -no siempre bondadosos- la intervención de la «pluma» del ex secretario de Estado de Comunicación, Miguel Barroso, en los discursos del presidente José Luis Rodríguez Zapatero.
La mano de Barroso, con quien Zapatero mantiene una estrechísima amistad, se dejó sentir con motivo del Debate sobre el estado de la Nación.
Hay que reconocer que Barroso es una mina. Para bien o para mal, porque hay a quien le encanta y otros, no obstante, creen que se pasa de caricaturesco. No tiene desperdicio.
En fin, que en ocasiones se pasa de cursi, pero la frase estrella pronunciada por el jefe del Ejecutivo en el Debate, aquella dirigida al presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, de que «han sido profetas del desastre y, además, un desastre como profetas», se ha atribuido al ex secretario de Estado de Comunicación.
Zapatero cree haber dado en su amigo con su particular piedra filosofal. En Ferraz y alrededores, donde no han visto desfilar muchas ideas geniales en estos años, saben que Barroso sigue en «la cocina». Desplazado de su escalón por voluntad propia, aunque abandonó la secretaría de Estado enfrentado con el portavoz parlamentario del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba y con el secretario de Organización, José Blanco, Barroso tiene seducido al líder.
Claro que se ignora si el cabecilla proetarra Arnaldo Otegi entiende algo de lirismo o atiende extasiado a las frases hechas del presidente. Sea como fuere, el caso es que a Zapatero le llueven a menudo, eso sí en privado, las críticas por prestarse en demasía a las ocurrencias literarias de Barroso.
En el Gobierno y en el PSOE así lo reconocen algunos desencantados, los menos, sin duda escépticos; pero eso sí, en voz baja, muy baja.
