El blog de Otramotro

Ángel Sáez García

Montoro en la mentira se da entero

MONTORO EN LA MENTIRA SE DA ENTERO

(SÍ/NO URDIÓ ESTA CARTA APÓCRIFA A OTRAMOTRO)

(TACHE USTED EL ADVERBIO IMPERTINENTE)

Dilecto Otramotro:

No me extraña nada (de nada) que tú, un ciudadano libre de la república literaria, como tu memorable maestro (aunque jamás te diera clases) fray Benito Jerónimo Feijoo y Montenegro, de quien te gusta recordar estas palabras (“las plumas vuelan, colocadas en las alas de las aves; pero no hay movimiento más perezoso que el suyo, puestas en las manos de los hombres”), que escribió en el prólogo (dirigido al lector) del tomo séptimo de su “Teatro Crítico Universal” (1765), expreses lo que ideas, esto es, lo que hoy, verbigracia, ha conseguido tamizar como verosímil tu cacumen, que yo, disfrazado de Cristóbal Montoro, en el ámbito de la mentira (que suele encerrar en su redil un montón de verdades) me suelo dar por partes, pero entero.

Como a ti, colega, epígono unamuniano y popperiano, no te puedo embelecar así como así, me avendré a reconocer lo obvio, la fetén, que has estado certero en tu análisis, que has vuelto a dar de lleno en el blanco o centro de la diana, al achacarme a mí y al resto del Gabinete de M. Rajoy, que ninguno, ni por separado ni mancomunadamente, actuáramos, echando mano de la política, cuando y como debimos, en tiempo y forma, porque, si hubiéramos hecho tal cosa entonces, ahora le ahorraríamos a la justicia española el charco en el que, por nuestra dejadez, está metida, pues hubiéramos podido desactivar el complejo mecanismo de la bomba del “procés”, y no que optamos, al salirnos por la tangente, por lo fácil, dejar que el problema se fuera pudriendo paulatinamente hasta que, al fin, explotó, en forma de hongo incomible, estomagante, y, de resultas de ello, a todos nos llegó, al menos, un ápice o pizca de su omnímoda y ominosa pus.

Siguiendo con la misma línea argumental, ahora que la Guardia Civil asevera que tiene constancia documental de que se gastaron 1,9 millones de euros, al menos, de dinero público para que tuviera lugar el referéndum ilegal del 1-O, admitiré, amigo Otramotro, que también tienes razón en lo tocante a que, si he iterado hasta el hartazgo que no hubo un solo euro que fuera a parar al susodicho 1-O, o sea, que no hubo malversación, ha sido para autodefenderme, como has colegido con tino, e intuido que esa, y no otra, podía ser la explicación más plausible y posible de mi pertinaz insistencia. Si yo, el máximo responsable de Hacienda, no he controlado cuanto, cuando y como debía, si no he cumplido a rajatabla con la labor supervisora que tenía asignada, es lógico y normal que haya mentido, como un bellaco, para quitarme ese marrón de encima, porque, si hubiera reconocido que era verdad, el juez competente en el caso me hubiera imputado ya, con razón, una “culpa in vigilando”.

Me consta que sabes que, desde el mes de noviembre de 2015, vengo diciendo que controlo (pero es trola) las finanzas de la Generalitat (sobre todo, a través del Fondo de Liquidez Autonómica, el FLA). Y, asimismo, es otra bola o bulo, que me peta airear por doquier, que, desde que está vigente la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña, todos los pagos que ha hecho el Gobierno (al no haber Govern) han tenido que superar un escrutinio exhaustivo para merecer portar el plácet necesario del departamento del dinero, que lidero. Así que te entiendo perfectamente cuando, según tú, ves perentorio que, a la mayor brevedad, debo acudir sin falta ante el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena a confesarle, como si me hallara postrado de hinojos ante un obispo o cardenal, pormenorizadamente, mis pecados; en concreto, por qué he largado lo que ha soltado mi mui, que lo ha puesto a los pies de caballos, esto es, en una situación de descrédito y/o desprestigio, a él, que está cumpliendo con su tarea con los máximos rigor y vigor; y, dado que nosotros, el barco del Ejecutivo que guía nuestro timonel, don Tancredo, Rajoy, nos hemos desentendido del “procés” y hemos dejado, como corresponde y procede, la gestión de los desmanes y dislates que han coronado los gerifaltes del desafío secesionista catalán en manos de la justicia, acaso convenga que no vengamos a entorpecer la labor de los jueces y, menos aún, a torpedeársela.

Te agradezco sobremanera que hayas sido persuasivo conmigo y que me hayas convencido y empujado a dar el paso que, mediante esta epístola, te adelanto que, si no me acongojo en el último momento, estoy dispuesto a dar.

Sin otro particular, se despide hasta la próxima

Egomet (disfrazado para la ocasión de Cristóbal Montoro, claro).

Ángel Sáez García
[email protected]

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Ángel Sáez García

Ángel Sáez García (Tudela, 30 de marzo de 1962), comenzó a estudiar Medicina, pero terminó licenciándose en Filosofía y Letras (Filología Hispánica), por la Universidad de Zaragoza.

Lo más leído