El blog de Otramotro

Ángel Sáez García

Epístola a Jesús, un epígono de Otramotro (CXXVI)

EPÍSTOLA A JESÚS, UN EPÍGONO DE OTRAMOTRO (CXXVI)

Dilecto Jesús (ese que yo sé), epígono de este aprendiz de ruiseñor:

Cuánta guasa (intuyo —aunque tengo para mí que, según el DRAE, el vocablo se contradice en sus dos primeras acepciones: “chanza, burla”, por un lado, y “falta de gracia”, por otro—, sospecho) contiene el primero de los párrafos de tu comentario (cuánta vaya has vertido en él y cuánto te has divertido tú y quien ha leído el susodicho), quiero decir, que no te ha faltado/sobrado zumba al llamar a las inexistentes (por ser personajes literarios, ficticios) Sol y Blasa pájaras (mujeres astutas, sagaces y cautelosas).

Has entendido estupendamente el final. Como aduces en primer lugar, el esposo o protagonista del sueño ha llamado dos veces al trabajo y el/la primer/a interlocutor/a le ha espetado “¡Hasta el gorro!” y el/la segundo/a interlocutor/a “¡Qué brasa!”.

Como sabes, yo siempre duermo solo. Pocas veces lo he hecho acompañado (de un libro —al quedarme dormido mientras lo leía— o una revista).

Ciertamente, me siento el triángulo o trípode que apuntas, riojano-navarro-maño (por ascendencia, nacimiento —que no miento— y actual residencia, y lugar donde cursé el B.U.P. y el C.O.U —creo que fue Max Aub quien dijo y quizás hasta dejó escrito que “uno es de donde estudia el bachillerato”—). Ergo, el adjetivo que no aparece, “riojano”, completa y complementa el binomio indicado. Espero que este breve apunte atenúe o mitigue el dolor que experimentaste al advertir la omisión de tan querido como mentado (por ambos) y documentado vocablo, “riojano”.

Si no se hace lo que refieres como remedio o solución, retirar la manzana podrida, puede acaecer que, a la postre, acabe pudriéndose hasta el propio cesto.

Sé de qué hablas, del depredador sexual a quien echaron el guante en Santander.

Aunque a ti y a mí nos importa un bledo el primer apellido de los pederastas citados, acaso a algún lector (ella o él) le interese conocer someramente algo de los mentados.

El exarzobispo polaco Józef Wesolowski fue arrestado en el Vaticano por orden del Sumo Pontífice (el papa Francisco, que había anunciado tolerancia cero contra los escándalos sexuales que salpicaran a la Iglesia, ha demostrado que es coherente, congruente, consecuente) a fin de que sea juzgado por delitos de pedofilia. El exnuncio apostólico de Santo Domingo, de 66 años, utilizaba a un diácono dominicano, que contactaba con adolescentes de las zonas del malecón con los que, previo pago, el pederasta lograba satisfacer su voraz apetito sexual. El exsacerdote (la Congregación para la Doctrina de la Fe lo expulsó del sacerdocio en 2013) guardaba en su ordenador más de 100.000 vídeos y fotos de contenidos pedófilos, descargados de Internet o grabados y sacadas a las propias víctimas.

Hay, al menos, dos sacerdotes (tal vez sean ya ex), cuyo primer apellido es Gil, que han sido acusados de pederastia: Guillermo Gil Torres y Wojciech (también conocido por Alberto) Gil.

Te saluda, aprecia, agradece y abraza

Ángel Sáez García
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Ángel Sáez García

Ángel Sáez García (Tudela, 30 de marzo de 1962), comenzó a estudiar Medicina, pero terminó licenciándose en Filosofía y Letras (Filología Hispánica), por la Universidad de Zaragoza.

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