El blog de Otramotro

Ángel Sáez García

Epístola a Jesús, un epígono de Otramotro (CXXI)

EPÍSTOLA A JESÚS, UN EPÍGONO DE OTRAMOTRO (CXXI)

Dilecto Jesús (ese que yo sé), epígono de este aprendiz de ruiseñor:

Ya sabes que todo depende del punto de vista (si seguimos o tenemos en cuenta la lección que nos dio otrora Ortega y Gasset sobre el perspectivismo) desde el que se ve algo (y hasta del cristal con que se mira), lo que sea. Tengo para mí, autor de la urdidura (o “urdiblanda”) que comentas, que el mentado contiene un argumento contundente (que en su segunda acepción, según el DRAE, también quiere decir “que produce gran impresión en el ánimo, convenciéndolo”), pero está claro que tu perspectiva sobre el asunto que trato o en cuestión no es la mía. Entiendo tu objeción, pero yo, al menos, no podía (ni estaba dispuesto a) caer en el mismo error que criticaba.

Ciertamente, el arranque ciceroniano de mi amigo “Metomentodo” puede resultar llamativo, por intrincado (más complejo o complicado que confuso).

En lo tocante a tu “¿claro?”, me ha venido a la mente este calambur de Enrique Jardiel Poncela, que acaso le cuadre a PI: “Cuando mejor se finge es cuando lo que se finge se finge de verdad”.

Para tu “¿directo?”, continuaré echando mano de Jardiel, que también urdió la frase que sigue: “El que no se atreve a ser inteligente se hace político”.

Ídem. Coincido con tu parecer. A mí la suma de esos tres momentos también me supo a poco.

No te/os hice un feo por no tomar nada con vosotros. Lo que me interesaba era tomaros a vosotros y, como os tomé más cariño que el que ya te/os tenía, todo resultó perfecto. Ya había tomado un café y un chupito de orujo de yerbas. Bastante o suficiente para mí.

Más o menos. Quise dar a entender que uno tiene que controlar siempre la situación, las circunstancias; o sea, no ser un monigote o pelele en manos de ella/s. O, si lo prefieres, siendo más concreto, que uno tiene que mandar sobre el uso del ordenador; no el ordenador sobre uno. Hoy hay mucho adicto (ella y él) a las nuevas tecnologías. Es algo que un día sí y otro también vengo comprobando.

La novela está en la cabeza. Carece de forma; por ahora, se reduce a meros fotogramas o fogonazos. Decía Pío Baroja que era un saco o saca donde cabía todo o de todo. Por ahora, insisto, es solo una idea, que irá tomando (eso espero, al menos) forma con la lectura y la reelaboración de los materiales que haya acopiado. Las revistillas me van a dar (esa es mi esperanza) mucho juego.

Si he cometido alguna indiscreción al citarte, te pido disculpas.

A pesar de que eres consciente de qué cuatro verbos coronan las epístolas que te dirijo, no es mi propósito que falten; ergo, ahí van: te saluda, aprecia, agradece y abraza tu amigo

Ángel Sáez García
[email protected]

Post Scríptum

Dales a tu esposa e hijo abrazos y/o besos (ad líbitum).

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Ángel Sáez García

Ángel Sáez García (Tudela, 30 de marzo de 1962), comenzó a estudiar Medicina, pero terminó licenciándose en Filosofía y Letras (Filología Hispánica), por la Universidad de Zaragoza.

Lo más leído