MADRID, 25 (OTR/PRESS)
Romina Belluscio bien podría decir eso de: «Yo soy una chica con suerte y estoy divina de la muerte», la frase no es mía sino de «Azúcar Moreno», la letra de esa canción pegó y mucho hace una década, y durante algunos años las hermanas Salazar también llevaron a gala este dicho…
A la «Miss Argentina» le sonríe la suerte desde que comenzara su andadura este verano en «Espejo Público», el programa de las mañanas de Antena 3, que por cierto, se mantiene como uno de los programas líderes de la cadena, la audiencia avala el trabajo bien hecho de la directora Belén García y de un equipo, en el que me incluyo y, que día a día hacemos lo posible y a veces lo imposible por sacar adelante un espacio de tres horas y media que ha conseguido fidelizar un público que sabe elegir lo que quiere y lo que verdaderamente le interesa. Susanna Griso sabe captar la atención de la audiencia y justo es reconocer que lo hace bien, pese a quien pese.
Pero vamos al tajo, como les contaba, Romina no sólo tiene la suerte de su parte en el trabajo, su flechazo con Guti ha avivado de nuevo sus endorfinas, que yo creo que nunca estuvieron dormidas, porque Romina es mucha Romina, y esto lo digo con cariño porque la conozco, es compañera y se deja querer.
La argentina es simpática y tiene buen sentido del humor, bromea con su historia de amor con el futbolista y da gusto ver que su cara se ilumina cuando en la reunión del programa a las seis de la mañana, le preguntamos entre risas: ¿Qué tal anoche Romina?, ella sonríe con cara de pícara y da el silencio por respuesta, pero es inevitable que crucemos miradas de complicidad, simplemente reivindico que esta argentina me divierte.
Ella no es tan «petarda» como otras que juegan al «sí pero no». Romina y Guti han cosechado un amor 2.0, es un amor con base tecnológica porque se fraguó a través del twitter, esa red social que tan de moda se ha puesto y a la que tan enganchada está mi presentadora favorita Susanna Griso.
Belluscio y Guti se conocieron hace unas semanas pero la relación evoluciona de forma abismal, cuando apenas llevaban unos días juntos el futbolista ya dijo que deseaba que Romina fuese la madre de sus hijos, ella asiente y acepta de buen grado los piropazos que le lanza su chico. Sus manifestaciones públicas de amor son casi constantes, no sólo en su twitter, tampoco esquivan a la prensa y eso influye para que se ganen con más facilidad la simpatía del público.
Lo que no sabíamos es que José María Gutierrez fuese tan impulsivo o estuviese tan loco de amor, la pareja acudió al concierto de un amigo y, en un arrebato de pasión el futbolista se subió al escenario y dijo: «quiero decir algo que va dirigido a una persona muy especial, ella es Romina Belluscio…», Guti la invitó a que subiera al escenario y sin titubeos le dijo: «¿Te quieres casar conmigo?», el final de la historia se la pueden imaginar, ella dijo: «Si».
A la mañana siguiente hablé con Romina y me dijo que todo había sido una broma de su chico, pero sigo pensando que «cuando el río suena, agua lleva…», mi amiga y compañera Lourdes Delgado y yo misma ya estamos pensando en el modelito que vamos a lucir… si nos invitan a la boda, claro.
