No más Mentiras

Antonio García Fuentes

Guarros y cerdos en mi ciudad

Guarros y cerdos en mi ciudad

Éste Jaén que es corto hasta de nombre… como le “canta el triste poema que le hice ya hace muchos años a mi propia tierra madre”; aparte de ese silencio atroz tanto de los que mandaron y mandan, como al del siempre “sojuzgado pueblo o masa habitante del mismo”; ahora se ve y cada vez más, inundado por la suciedad o mierda que ni los propios cerdos aguantan; puesto que el cerdo en libertad busca su propio aseo y cuido corporal, cosa que desde luego en “la cochiquera o zahúrda”, el animal no puede, ya que sus propietarios, lo obligan a permanecer en ella junto a sus deposiciones; y de ahí le viene al animal lo de haber sido tratado desde siempre, como “guarro o sucio en demasía”.
Aquí en mi ciudad no “andan sueltos los cerdos de cuatro patas, pero sí los de dos y de todas las edades, amén de los que de fuera nos lleguen y que no han de faltar”, por la profusión de suciedades que inundan la capital, cuya catedral (bellísima) tratan de situarla como “bien mundial”; pero el conjunto capitalino, ya fue declarada como las más sucia de toda España, la más endeudada del país, y va camino de ser la más decadente, por cuanto de despoblación soportamos cada año; y es por lo que pasear por ella, a los que de verdad la queremos, es un martirio diario.

Es cuasi inenarrable la cantidad de “cerdos y marranos” que han de pulular por esta “sucia villa” (aunque es capital de provincia); y lo puedes ver tu mismo si te fijas no sólo en los detritus, que encuentras a tu paso, en calles, aceras, alcorques del poco arbolado que encuentras; en las jardineras y jardines y hasta en las propias puertas de “algún o algunos organismos oficiales”, donde y como no dejan fumar dentro, los adictos al tabaco, cada dos por tres, salen a fumar a la calle y “siembran el entorno de colillas de cigarro”.
Encuentras igualmente en todos esos lugares y otros que no recuerdo ahora, botellas y latas de cerveza y refrescos ya vacías, vasos de cristal o de plástico (algunos medio llenos de la bebida adquirida); envolturas de caramelos, de chicles y las mil “chucherías” que se venden para chicos y grandes; envueltas de toallitas o incluso pañales de bebé con sus “olorosos contenidos”… y hasta algún condón que yo he visto, en el asfalto de alguna calle por la que he pasado; siguen chicles pegados en cualquier bordillo público, caramelos tirados y todo lo que usted pueda imaginar que consume “el mono humano y sus crías”, que mal educadas como el adulto, lo van tirando todo por doquier.
Añadamos igualmente, muebles desechados y demás cosas que se tiran a la calle o como mucho dejándolas al lado del contenedor de basuras, para que las recoja cuando pase, la camioneta municipal.
Esos contenedores que al parecer apenas si se limpian, si es que lo hacen alguna vez “en algún año” y que algunos huelen que apestan, aún en invierno, puesto que “el pescadero” de al lado, tira todo lo que le sobra al que tiene más cercano y así y aumentando lo que se le ocurra, mi ciudad es un basurero, que no tendrá igual, salvo en esos lugares “urbanos del maloliente oriente o extremo del mismo y donde las ratas conviven con aquellos seres, como aquí convivíamos con los gorriones, que cada vez se ven menos, puesto que al final estos minúsculos barrenderos de las sobras del ser humano, se han ido muriendo de hambre y sólo nos van quedando, algunos gatos cimarrones, que mal viven de lo que le pillan a los homos… dicen que sapiens y sapiens”; cosa ésta última que me hacer reír… “hasta con lágrimas en los ojos”.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen-ciudad.es (aquí mucho más) y
http://www.bubok.es/autores/GarciaFuentes

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Antonio García Fuentes

Empezó a escribir en prensa y revistas en 1975 en el “Diario Jaén”. Tiene en su haber miles de artículos publicados y, actualmente, publica incluso en Estados Unidos. Tiene también una docena de libros publicados, el primero escrito en 1.965, otros tantos sin publicar y mucho material escrito y archivado. Ha pronunciado conferencias, charlas y coloquios y otras actividades similares.

Lo más leído