No más Mentiras

Antonio García Fuentes

Indefensos ante una delincuencia impune

Indefensos ante una delincuencia impune

Estamos inmersos en un nuevo Medioevo, donde y cambiando los escenarios pero cada vez se van dando similares hechos a los que se dieron en el anterior… “Bandas de bandidos que sin miedo a los castigos de leyes apropiadas, campan por sus respetos, hacen lo que quieren sobre bienes y haciendas y la autoridad y leyes establecidas, se muestran impotentes (¿o ya indiferentes por la abundancia de hechos que no saben controlar?) Reyezuelos feudales y que dentro de sus feudos, obran con impunidad inexplicable; masas de indefensos que ya empobrecidos entran en la indigencia, etc…?
Ante lo que tenemos encima y la inseguridad que amenaza en cualquier lugar a “vidas y haciendas”, de los que a su vez estamos viendo que sólo nos quieren para que paguemos los enormes impuestos que pagamos a un Estado, que sólo se preocupa de recaudar y que las castas dominantes disfruten de los grandes beneficios que reporta el estar al servicio del sistema”. Sólo se preocupan de distraernos incluso drogándonos con la gran cantidad de drogas que nos echan y que la masa acepta.

Comparemos a aquellos señores feudales con los actuales; apreciaremos a aquellos “feudales” con los actuales y veremos que similarmente somos súbditos o “siervos” y no ciudadanos, puesto que ya nos parecemos más a aquellos siervos o “pecheros”, que tenían que sostener a aquellos señores, incluso llegando al “derecho de pernada”, que, de variada forma se ha seguido practicando siempre, aunque hoy se practique “previo pago de su importe”.
Reflexiono así hoy seis décadas después, de asistir a una conferencia donde un extraño disertador, nos hablaba de cosas que en aquella época eran absurdas, pero que se han ido cumpliendo. Dijo aquel individuo que habíamos entrado en dos nuevos ciclos que debería sufrir el planeta. Uno era el cambio “espacial” puesto que habíamos dejado atrás la era de “Piscis” y entrábamos en la de “Acuario”, donde predominaría la disolución más que la consistencia y la unidad; puesto que así obraría la “era del agua”; por tanto nos esperaban muchos años de “disoluciones más que de soluciones” y donde todo tipo de pillajes asolarían a la civilización que creíamos fuerte y consolidada.
El otro cambio importante era el nuevo Medievo; que era un retroceso en todo el sistema político, donde el ser humano volvería a vivir el poder que imperó en el anterior; o sea el de la fuerza bruta, la injusticia en todas sus versiones y algunas nuevas que aparecerían; y en general, “todo lo que ha ido ocurriendo de desastres y que no creo necesario recordar”; ya que, quién iba a pensar en los años 50/60 que desaparecería la URSS, que Inglaterra estaría a punto de dividirse o que abandonaría la UE; o que incluso España sufriera el acoso actual de la secesión; casos importantes en el mundo y sin buscar otros muchos que se podrían nombrar. La familia considerada normal es que ya ha desaparecido en Occidente, donde la procreación ya ni cubre la mortandad natural; se tiende al individuo solo preocupado de sus goces y caprichos y cada vez más los viejos en soledad, que así mueren sin ser detectada su ausencia hasta que lo denuncia el hedor de sus cadáveres.
La delincuencia ha crecido tan masivamente, que y como caso significativo, en los tan “libres o liberales”, Estados Unidos de América, hay más cárceles y presos que en ningún país comparando ello proporcionalmente. Si hablamos de “su vecino Méjico”, aquello ya es un infierno y donde la vida de un ser humano, vale menos que la de una iguana de sus territorios, lo que igualmente ocurre en otros países vecinos y en otros muchos del ancho mundo.
El miedo aún en países que dicen haber progresado grandemente, es enorme y ello lo podemos apreciar, en que hoy ni los niños, que en mi niñez, jugábamos a nuestras anchas en la propia calle donde vivíamos, descampados o jardines públicos; hoy ni pueden jugar con tranquilidad en los espacios con que cuentan las escuelas o institutos para ello; puesto que suelen ser lugares peligrosos o muy peligrosos y donde incluso los pueden raptar; o hacerlos adictos a las drogas; ya que allí se las venden como si fueran caramelos. No necesito hablar del alcohol, puesto que ello ya es sobradamente conocido. De la educación y formación que imparten padres y maestros mejor ni hablar.
Del robo y extorsión de todas las formas imaginables, hay abundancia tal, que si pudiéramos saber los hechos que aquí donde nací y vivo (España) ocurren cada día nos horrorizaríamos, ya que; hasta en los extrarradios más apartados ocurren cosas como las que refiero. Atracos de todo tipo incluso con pistola en mano, voladura de cajeros automáticos mediante explosión con carga de gas, robo de cosechas, de instalaciones de cableado de cobre para luego venderlo como chatarra y múltiples cosas más; son la noticia del día y la que incluso nos llega a parecer, “lo más normal del mundo”; no olvidemos la explotación del ser humano, considerado como semi esclavo o esclavo total y de lo que hay noticias más que suficientes. Violaciones abusos de todo tipo, terribles entre niños compañeros de colegio, asesinato del padre o la madre, también de los hijos, violencia en familia donde la muerte abunda.
Si todo esto que digo y cuanto se puede añadir es progreso; que los inútiles políticos que no paran de hablar de ello y de que vivimos “en paz y libertad”, me lo expliquen, puesto que para mí no tiene explicación. Vivimos en un retroceso continuo y donde el animal humano, está progresando y cada vez más, en eso mismo; ANIMALIDAD, MALDAD, DESCONTROL Y DEJADO A SU LIBRE ALBEDRÍO EN LA PROPIA SELVA QUE LE HAN DEJADO CREAR. O que le han creado adrede para que “progrese” en ella.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen-ciudad.es (aquí mucho más) y
http://www.bubok.es/autores/GarciaFuentes

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Antonio García Fuentes

Empezó a escribir en prensa y revistas en 1975 en el “Diario Jaén”. Tiene en su haber miles de artículos publicados y, actualmente, publica incluso en Estados Unidos. Tiene también una docena de libros publicados, el primero escrito en 1.965, otros tantos sin publicar y mucho material escrito y archivado. Ha pronunciado conferencias, charlas y coloquios y otras actividades similares.

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