Ana Avellano y Miguel Pato (PD)-. Ramón Fernández Durán presenta en ‘El crepúsculo de la era trágica del petróleo. Pico del oro negro y colapso financiero (y ecológico) mundial’ donde habla de la situación que se vive en estos momentos por la falta de petróleo y del próximo Congreso Petrolero Mundial que se celebra en Madrid, desde el 29 de junio al 3 de julio de 2008.
El Congreso Petrolero Mundial (CPM) se celebra cada tres años desde 1933. Para esta reunión se reúnen las grandes empresas petroleras públicas y privadas y los representantes de los principales Estados extractores y consumidores.
En paralelo al CPM, explica Ramón Fernández Durán,
«Desde el 27 de junio al 4 de julio, el llamado Encuentro Social Alternativo al Petróleo (ESAP) con el fin de impulsar una reflexión crítica respecto al papel del petróleo en nuestras sociedades y movilizaciones sociales en la calle contra el CPM.»
“El petróleo no se convierte en la primera fuente de energía mundial hasta mediados del siglo XX sobre todo en los países del norte”
Ramón Fernández, miembro tambien de Ecologistas en Acción y del movimiento «No más sangre por petróleo», cuenta cómo la industria del petróleo hasta ahora había sido una doctrina occidental ya que, hasta los 60, fueron los ingleses quienes dominaron el petróleo. En 1960 se crea la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) con intención de controlar los precios del crudo pero hasta los 70 no lo consiguieron.
En los principales países con reservas, en los 60, se nacionaliza el petróleo y es cuando “cambia la cosa” como dice Ramón Fernández y la OPEP comienza a controlar el mercado del crudo.
“Ahora está el crudo a 18 veces por encima del precio de hace diez años”
El autor considera que la globalización y una mayor producción han conllevado a un desarrollo espectacular del petróleo debido al transporte marítimo, aéreo y por carretera, dependiendo del crudo.
“Es difícil poner más oferta en el mercado ya que ni siquiera los países productores son capaces de producir más crudo en el mercado”.
Ramón Fernández Durán cuenta cómo Bush Padre en 1991 justificó la intervención en Oriente Medio “en base a la defensa de la vida americana”. Como indica el autor el movimiento estadounidense de la no intervención llegó a acuñar el lema de “no más sangre por el petróleo”.
“El lema ‘no más sangre por el petróleo’ se unificó a escala mundial en la manifestación de febrero de 2003 en muchos países, España entre ellos”.
