Británica, sencilla y cristalina, guarda de fondo un secreto de juventud que cambió la vida de unos compañeros de universidad para siempre. La llegada de una misteriosa carta, con un testamento extraño, revuelve la vida de los antiguos compañeros de clase.
La dirección de Ritesh Batra es sobria y académica. El guion, una adaptación de la novela de Julian Barnes del mismo título, es inteligente, conmovedor y está bien construido, aunque no llega a ser brillante.
Por el contrario, la interpretación de Charlotte Rampling y, sobre todo, de Jim Broadbent es sorprendente y profunda. Solo por eso merece la pena verla.
3 ★★★