Es de importancia capital que todos conozcan este Informe. Tuve acceso a él, a través de algunos amigos del gobierno, que no comparten mucho de lo que sucede.
¿Conspiración en marcha? ¿Presión militar? ¿Golpe en proceso? Léalo y saque usted sus propias conclusiones. Solo agradezco la mayor prudencia, en el uso de la información que aquí se maneja.
1. Fuentes de inteligencia están notablemente sorprendidas que los informes que han hecho, en que se deja claro el descontento dentro de las Fuerzas Armadas, no se han tenido en cuenta por el gobierno para actuar en consecuencia.
2. La influencia de Diosdado Cabello crece al paso en que los miembros de su promoción en la academia militar, son nombrados comandantes de los REDI. Sin embargo, los informes acerca de su dominación sobre el estamento militar están sobrestimados.
3. El tiempo para los ascensos de coronel a general, son especialmente tensos este año. El Presidente Maduro, tratará de retardar los ascensos tanto como pueda, para evitar la desestabilización.
4. El ataque de helicóptero realizado por el agente del CICPC Oscar Pérez tiene los visos, a pesar de lo poco efectivo, de ser un auténtico intento de desestabilizar al régimen.
DESCONTENTO MILITAR
Nuestras fuentes en el Directorio de Contra-inteligencia Militar (DGCIM), se encuentran tan preocupados, confundidos y enojados, que no saben ya qué hacer: Sus informes caen en oídos sordos. En particular, se le ha advertido reiteradamente al Presidente Maduro, que la Asamblea Constituyente, ha generado una creciente ola de descontento en todos los componentes de la fuerza armada. Dicho descontento tiene que ver con el consenso, cada vez más sólido, de que la Constituyente que está proponiendo representa el final definitivo de la democracia, y que debe ser detenida.
Los oficiales de inteligencia han constatado que sus informes urgentes y reiterados, son ignorados. El Presidente Maduro solo presta atención a un pequeño círculo de consejeros civiles y simplemente ha decidido ignorar las advertencias que los agentes de inteligencia le envían, a través de los canales regulares, incluyendo tanto el directorio del SEBIN, en el lado civil, como del DGCIM, en el lado militar.
La camarilla gobernante deja a la DGCIM, en particular a los agentes de
inteligencia, en una situación prácticamente imposible. Es claro que si vigilas a 30 oficiales y uno de ellos habla abiertamente contra el gobierno, ese oficial está en problemas. Por otro lado, si vigilas a 30 y los 30 hablan en contra del gobierno, entonces eres tú quien está en problemas. Finalmente, si los agentes de inteligencia se sienten identificados con las conversaciones que monitorean de esos 30 oficiales, entonces es el gobierno quien está en problemas (subrayado nuestro).
El último caso es el que debería ser más preocupante para Maduro. La discusión entre agentes de inteligencia, revela que los informes no le llegan al Presiente. En parte por lo dicho arriba. Pero también en parte porque los agentes de inteligencia también están de acuerdo en que la Constituyente va a hacer crecer las tensiones aún más, y no están particularmente interesados en reportar a oficiales militares que piensan así.
ASCENSOS Y NUEVOS LÍDERES MILITARES
La semana pasada el presidente nombró a un grupo de poderosos nuevos líderes militares en las regiones. Un comandante de un REDI (Estructura de comando superior a cargo de una región o grupo de estados) es una especie de procónsul (Aclaratoria nuestra: figura de la historia romana) con amplia autoridad militar, de seguridad y hasta de gobierno en su respectiva región. Como se sabe ampliamente, la nueva cohorte de comandantes REDI pertenece toda a la promoción de 1987 del Ejército (promoción Ejército 1987: General de Brigada Tomás Montilla). Como es la cohorte del propio Diosdado Cabello, él tiene relaciones personales especialmente fuertes con el nuevo equipo de comandantes, y su ascenso al poder, aumenta su influencia sobre las Fuerzas Armadas.
Por lo menos de esto no hay duda: Cabello jugó un importante papel en el lobby para encumbrar a sus protegidos. Sin embargo, nuestras fuentes militares concuerdan, en que a esto, se le está dando demasiada importancia. Cabello es uno de varios jugadores que hizo lobby en los nombramientos de los REDI, es cierto. Pero no fue el único. El ex comandante del Ejército, Mayor General Juan de Jesús García Toussaintt, excluido recientemente por cuestionar la Constituyente, ejerció, igualmente, considerable influencia.
La razón de más peso para pensar que la influencia de Cabello, sobre el estamento militar está sobrevalorado, es la de que el contexto operacional en que los nuevos comandantes de REDI operan, es crecientemente hostil a la camarilla gobernante. La presión desde las propias filas de mando, y el creciente consenso de endurecimiento contra el gobierno en todo el estamento militar, crean un ambiente donde los oficiales leales al régimen, colocados en los mandos superiores, quedan cada vez más aislados. Aún si Cabello fuera capaz de generar órdenes obedecidas por los nuevos comandantes de los REDI, no puede asegurar que esas órdenes van a ser puestas en práctica: ahora más que nunca, la integridad de la cadena de mando está sujeta a fuertes dudas (SUBRAYADO NUESTRO).
Otra consideración que va a pesar en los nuevos comandantes de REDI (y en todas las cadenas de comando, igualmente), es la decisión de la Fiscal General Luisa Ortega Díaz, de llamar a declarar al ex comandante general de la Guardia Nacional, Benavides Torres, bajo acusación de cometer abusos graves contra los derechos humanos. La acción de Ortega Díaz generó toda una ola de repercusiones a través de todo el establecimiento militar: es algo sin precedentes, y no puede ser desmontado con facilidad.
Aún si, como se espera, el Tribunal Supremo remueve a Ortega Díaz de su puesto en los próximos días, y hasta la manda a la cárcel, las carpetas de la investigación incoada permanecen, y Benavides Torres va a estar a la cabeza por investigación criminal en cualquier gobierno que venga después de este.
La investigación de Benavides Torres deja en una situación de alta exposición, de vulnerabilidad, a los oficiales del régimen que siguen órdenes del gobierno destinadas a violar los derechos humanos. Los nuevos comandantes de REDI se ven en una situación en que lideran unidades que son un hervidero, en que hay cada vez más descontento expresado de manera abierta, y con oficiales conscientes de las implicaciones de incriminación potencial para ellos de seguir ciertas órdenes. Dentro de la Guardia Nacional, donde hay una cultura más permisiva con la represión, esto quizá no se transforme en un asunto importante en lo inmediato. Pero en otras ramas militares, como el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea, la investigación contra Benavides va a generar oposición contra órdenes de reprimir a ciudadanos protestando, si tal orden llega a ellos.
Las acciones pendientes del gobierno contra Ortega Díaz, y contra el general disidente Miguel Rodríguez Torres, ambos de quienes se sabe que tienen profundas relaciones personales a lo largo y ancho de los sectores civiles y militares del chavismo, van a implicar desestabilización adicional del régimen en los próximos días.
PELIGRO EN PUERTA
Por otro lado, mientras los nuevos nombramientos de posiciones claves en el comando de la fuerza armada, ascensos desde los rangos de Coronel al de General, y otros a lo largo de la cadena de mando, han sido retrasados, en un entorno de especulación sobre la posibilidad de que pueden ser retrasados más allá de la fecha tradicional del 5 de Julio (el día de la independencia). En la atmósfera presente, los ascensos son materia de especial tensión para el gobierno. Oficiales de alto rango han estado presionando intensamente para garantizar que sus protegidos asciendan a lo largo de las cadenas de mando. Así, son inevitables grandes niveles de insatisfacción entre quienes no son ascendidos. Este es un ejercicio muy delicado, lleno de peligros para el gobierno. Y por esta razón es probable que se retrase tanto como sea posible. De acuerdo a nuestra manera de ver, caeteribus paribus (si se deja el resto de circunstancias sin cambiar), un movimiento contra el gobierno es más probable el día después de los ascensos que el día antes (SUBRAYADO NUESTRO).
ACLARATORIA DEL COLUMNISTA
Debemos dejar claro que no tenemos información específica sobre una conspiración militar contra el gobierno. Sin embargo, a medida que el gobierno redobla sus planes y acciones a favor de una Constituyente, que muchos en el estamento militar ven como simplemente inaceptable, el riesgo de un movimiento militar contra Maduro evidentemente sube. No sabemos si va a venir en la forma de un levantamiento de una unidad militar, un pronunciamiento, un golpe palaciego, o un golpe tradicional, o si se va a dar o no, en todo caso. Tampoco podemos estar seguros de qué actitud van a adoptar ante una crisis de este tipo los dos militares de más alto mando, el Ministro de la defensa Padrino López, y el jefe de la CEOFANB, Ceballos Ichaso. Lo que sí podemos decir es que cualquier movimiento en la dirección de una revuelta tiene alta probabilidad de ser apoyado por una porción considerable de las Fuerzas Armadas.
INCIDENTE CON EL HELICÓPTERO
Los encabezados noticiosos de esta semana estuvieron dominados por el extraño vuelo de un helicóptero comandado por el oficial de Operaciones Especiales del CICPC Oscar Pérez en el centro de Caracas. Aspectos cruciales del incidente permanecen bajo el misterio. Es muy difícil imaginar, por ejemplo, porqué la televisión del estado no ha mostrado imágenes del daño que presuntamente Pérez produjo como consecuencia de su acción, lo cual llevó a alguna especulación sobre si el vuelo fue un montaje del gobierno.
Sin embargo, hay algo que podemos constatar: Pérez ha sido un oficial respetado del cuerpo de Operaciones Especiales del CICPC por largo tiempo. Y además ha sido conocido por albergar y expresar puntos de vista muy fuertes contra el gobierno de Maduro. Tales puntos de vista no son raros en el CICPC, y se cree que Pérez tiene un buen número de simpatizantes, y, quizás, colaboradores en este cuerpo policial.
Luego del ataque, los líderes del CICPC lanzaron una operación masiva de captura no solo contra él, sino también contra sus colaboradores dentro del cuerpo policial.
Por otro lado, las fuerzas militares respondieron como si se tratara de una amenaza real; no como si fuera un montaje. Con tanques ligeros estacionados alrededor del Palacio de Miraflores, y con la unidad blindada Batallón Ayala, del fuerte Tiuna, puesta en alerta roja. En otras palabras, el presunto ataque no parece haber sido un montaje con objetivos de mera propaganda, o como movimiento táctico para sacar ventaja de él. Parece, por el contrario, haber sido un intento real, aunque infructuoso, para desestabilizar al gobierno. Finalmente, el movimiento de Pérez puso en evidencia la ausencia absoluta de radar de defensa aérea para cubrir Caracas. Un hecho que decepcionó a la oficialidad de la Fuerza Aérea, debido al significado de inteligencia ante los poderes foráneos, quienes ahora saben que pueden volar sobre la capital de Venezuela sin ser detectados ni neutralizados militarmente (SUBRAYADO NUESTRO).
Hasta aquí el Informe.
DE ÚLTIMA HORA:
AUDIO que deben escuchar:
Con relación al audio entiendo insubordinación de parte de los paramilitares que atacaron la AN, el «golfo noviembre Lugo» es el inefable GNB coronel Lugo, la “oveja” que empujó a julio Borges, este audio es importante que lo analicemos todos y lo comentemos ya que se evidencia PÁNICO entre ellos, hablan de 15 días, es bueno saber que lo tienen claro.
SITUACION: Esta detenido Un Comandante (no señalo el nombre porque no he podido confirmarlo) por estar conspirando, el cmdte Gral del ejercito intervino la unidad (donde estaba ese comandante) a las 0100 hrs y se encuentra en esa unidad.
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