+ Hace tres meses, Matamoros inauguró un grupo táctico de seguridad al que se le puso el nombre de Hércules
+ Hallan muertos a texanos detenidos; indagan a policías de élite de Matamoros
+ Érica y su novio estaban comiendo en un puesto de carne asada mientras esperaban la llegada de Alex y José Ángel
A continuación cedemos nuestro espacio a estas dos informaciones que sin duda alguna resultan de interés internacional:
En la primera se reproduce de manera íntegra la “Bitácora de Director”, Columna diaria de Pascal Beltrán del Río -30/10/2014 02:17-, Director del periódico Excélsior. Y la segunda una nota informativa trata del hallazgo de los cadáveres de las texanas detenidos en Tamaulipas; sobre esta historia se indagan a policías de élite de Matamoros.
He aquí el primer texto intitulado:Los muchachos rudos de Matamoros
“”Los muchachos rudos de Matamoros. Viendo lo que sucede en el municipio de Iguala y el estado de Guerrero —y, antes pasó en Michoacán—, muchas autoridades locales han puesto sus barbas a remojar.
No pueden darse el lujo de parecer indolentes frente al crimen organizado. Va de por medio su cargo. Y deje usted su cargo, lo que está en juego aquí es toda su carrera política.
Por eso está de moda entre gobernadores y alcaldes parecer duros con la delincuencia. Esa moda quizá puede haber superado la de crear programas para regalar dinero público.
Una forma de mostrar rudeza con los criminales es organizar cuerpos de seguridad de élite. Y si puede asistir alguna figura política relevante a darles el banderazo de salida, pues mejor. Se trata de que sea lo más mediático posible.
Una de esas autoridades es Norma Leticia Salazar Vázquez, la alcaldesa de Matamoros, de extracción panista.
Hace casi un año, ella se había enfrascado en una polémica con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, luego de hacer un llamado a la población de su municipio a permanecer en sus casas por una serie de balaceras que se había registrado.
Esa vez, Osorio Chong afirmó que lamentaba el exhorto público de Salazar porque no tomaba en cuenta el trabajo de coordinación que realizaban la Federación y el estado de Tamaulipas para regresar la tranquilidad a una plaza que estaba “prácticamente abandonada”.
Hace tres meses, Matamoros inauguró un grupo táctico de seguridad al que se le puso el nombre de Hércules. Su función sería tan estratégica en el combate a la criminalidad que el número de elementos que lo conforman y el salario que éstos percibirían no fueron revelados.
Tocó presentarlo ante los medios al oficial mayor del ayuntamiento, Joe Mariano Vega Rodríguez, un personaje que ha sido señalado en los medios locales por estar acusado de fraude en el estado de Morelos y por vivir en Brownsville, Texas, a pesar de que la alcaldesa hizo la promesa durante su campaña de que todos sus funcionarios vivirían en Matamoros.
Al anunciar la puesta en marcha del Grupo Táctico Operativos Hércules Matamoros, Vega Rodríguez dijo que el nuevo cuerpo se coordinaría con los elementos de la Armada que trabajan en labores de seguridad en el municipio fronterizo.
El funcionario, quien informó que él, personalmente, estaría al frente del Grupo Hércules, describió así sus responsabilidades: “Ellos van a estar en los operativos, no son una policía, no son oficiales de Tránsito, es un grupo de ‘choque’, por así llamarlo, un grupo táctico-operativo para atender todas las situaciones de riesgo como secuestros, casas de seguridad; asistirán donde reporten enfrentamientos, es un grupo preparado y adiestrado para eso”.
Tras de afirmar que él había conocido todo el proceso de formación del agrupamiento, Vega metió la mano al fuego por sus muchachos. Dijo que eran incorruptibles, que estaban ahí para servir a la ciudadanía y que tenían buena preparación física y mental, así como “la sangre” (sic) para actuar en momentos delicados.
Sin embargo, no pasaría un trimestre antes de que el Grupo Hércules se viera involucrado en una grave acusación.
El lunes 13 de octubre, los hermanos Érica, Alex y José Ángel Alvarado Rivera fueron extraídos, presuntamente por elementos de ese agrupamiento, cerca del puente internacional Los Indios.
Los tres jóvenes —de 26, 22 y 21 años de edad, respectivamente— viven en Progreso, Texas, y habían ido al poblado de El Control, municipio de Matamoros, a visitar a su padre. Los tres son ciudadanos estadunidenses.
De acuerdo con el relato que hizo su madre, en entrevista con mi compañera Adela Micha, Érica y su novio estaban comiendo en un puesto de carne asada mientras esperaban la llegada de Alex y José Ángel, quienes llevarían una camioneta.
Dijo que personas que se encontraban en el lugar le contaron que se los habían llevado en un vehículo del Grupo Hércules.
Según medios de Estados Unidos, la embajada de ese país en México y el FBI ya están enterados de la desaparición de los tres jóvenes.
A reserva de cómo termine este caso, del que habrá que estar pendientes, es evidente que muchos gobiernos estatales y autoridades municipales están apostando por frenar a la delincuencia mediante la formación de corporaciones de este tipo.
El problema es que parecen ser soluciones mediáticas más que reales a una crisis de seguridad que tiene su origen en la ausencia del Estado de derecho. Lo que están haciendo en muchas entidades y municipios es combatir fuego con gasolina, cuando lo que se requiere son policías eficaces que sean firmes en la aplicación de la ley, pero con respeto a los derechos humanos.
Hay demasiados ejemplos de corporaciones policiacas a las que se les ha permitido lo que sea, en un intento por combatir el crimen, y acabaron en el abuso e incluso en la comisión de delitos.
Hace unos días, el propio secretario de la Defensa, refiriéndose al caso Tlatlaya, dijo que los militares no deben “rebajar sus actos a niveles que son propios de los delincuentes”, y que quienes lo hagan serán sancionados.
Deben tomar nota todos los gobernantes: su deber es aplicar la ley, pero hacerlo como debe ser, y no sólo pensando en salvar sus carreras políticas””. “Bitácora de Director” Columna diaria del Pascal Beltrán del Río 30/10/2014 02:17, Director del periódico Excélsior, http://www.excelsior.com.mx/opinion/pascal-beltran-del-rio/2014/10/30/989667
++ Hallan muertos a texanos detenidos; indagan a policías de élite de Matamoros. CIUDAD VICTORIA, 31 de octubre.— El gobierno de Tamaulipas informó del hallazgo de los cuerpos de tres estadunidenses y un mexicano en Matamoros, desaparecidos desde el pasado 13 de octubre.
Las víctimas son los hermanos Érica, Alex y José Ángel Alvarado Rivera de 26, 22 y 21 años, respectivamente, residentes de Texas, y José Guadalupe Castañeda, novio de la joven.
El secretario general de Gobierno, Herminio Garza Palacios, y el procurador General de Justicia del estado, Ismael Quintanilla Acosta, explicaron en conferencia de prensa que los cuerpos fueron hallados con un disparo en la cabeza, en estado de descomposición y que ya fueron identificados por familiares.
De acuerdo con las primeras investigaciones, los hermanos visitaban a su padre en el poblado de Control, en Matamoros.
La madre de ellos, la señora Raquel Rivera, denunció que, de acuerdo con testigos, agentes del grupo de élite Hércules, al servicio de la alcaldesa Norma Leticia Salazar Vázquez, fueron los responsables de detenerlos junto con el novio de la joven.
El procurador informó que como parte de las investigaciones citarán a nueve elementos del grupo policial.
De ser necesario, aseguró Quintanilla Acosta, también se citará a declarar a la alcaldesa.
El gobernador Egidio Torre Cantú aseguró que aplicará todo el peso de la ley en el caso.
Confirman muerte de estadunidenses
Autoridades de Tamaulipas informaron en conferencia que serán citados elementos del grupo policiaco de Matamoros Hércules.
Luego de 17 días de permanecer en calidad de desaparecidos, tres jóvenes de origen estadunidense que visitaban a su padre en el poblado de Control, Matamoros, Tamaulipas, fueron localizados muertos en esa localidad fronteriza, junto con un amigo de origen mexicano que también perdió la vida.
El secretario general de Gobierno de Tamaulipas, Herminio Garza Palacios, y el procurador General de Justicia de Tamaulipas, Ismael Quintanilla Acosta, confirmaron en conferencia de prensa conjunta que tras el hallazgo de los cuatro cuerpos el pasado miércoles, fueron reconocidos por familiares.
Los funcionarios dieron a conocer que el señor Pedro Alvarado, padre de los jóvenes Érica, Alex y José Ángel Alvarado Rivera de 26, 22 y 21 años de edad, fue quien los identificó mediante fotografías y los restos mostrados en el Servicio Médico Forense. Al cuarto joven de nombre José Guadalupe Castañeda, presuntamente novio de la joven, lo identificó su madre.
Los cuerpos presentaban un estado avanzado de descomposición, un impacto de arma de fuego en la cabeza y estaban maniatados, además que registraban quemaduras por la exposición prolongada a los rayos solares.
De acuerdo con las primeras indagatorias, habrían sido asesinados prácticamente desde su desaparición, y no fue en el sitio donde se localizaron, ya que no hay registros de huellas hemáticas, ni casquillos, lo que presume fueron abandonados ya sin vida.
Refirieron que los jóvenes estuvieron ilocalizables desde el pasado 13 de octubre y fue hasta el día 17 del mismo mes cuando se presenta la denuncia correspondiente ante la delegación de la PGJE en Matamoros, cuando se da inicio a la integración de la Averiguación Previa y las investigaciones correspondientes.
“Inició una vez que el señor Pedro Alvarado puso la denuncia correspondiente por la desaparición de sus hijos y con motivo de ello el agente del Ministerio Público que conoce de la averiguación ha estado desahogando diversas diligencias, han comparecido algunos testigos, se han realizado inspecciones oculares”, dijo Quintanilla Acosta.
Agregó: “lamentablemente ayer pudimos constatar el hallazgo de los cuatro cuerpos, ahorita estamos en condiciones de acuerdo con lo que manifiestan el padre en este caso y la madre de crianza del cuarto joven que los reconocen como las personas desaparecidas”.
Una vez constatado por los padres, las investigaciones continuarán con la aplicación de las pruebas de ADN, las cuales luego de tomar las muestras a los familiares, fueron enviadas a laboratorios de la capital del estado, Ciudad Victoria.
No obstante reconoce el procurador que se tardarán hasta cuatro días, debido a que los cuerpos localizados están en estado de putrefacción y eso complicará el análisis en los equipos especializados.
El titular de la PGJE dio a conocer que como parte de las investigaciones ya se citó a nueve elementos integrantes del grupo Hércules, en calidad de testigos y al ser señalados por la señora Raquel Rivera como los responsables de la detención de los fallecidos.
Sin embargo, no sólo serán esos elementos, ya que en dado caso se requiere la presencia de otros elementos de ese grupo serán citados a declarar, informó la autoridad.
Dejó abierta la posibilidad, en caso de resultar necesario citar a comparecer a la alcaldesa Norma Leticia Salazar Vázquez, como parte de las indagatorias.
Además, se podría citar a declarar al propietario de la comercializadora Alfa, Luis Alfredo Biasi, quien actualmente es secretario de Desarrollo y Bienestar Social en el ayuntamiento de Matamoros, debido a que fue en ese establecimiento donde se localizaron los vehículos de los jóvenes.
Luego que había trascendido que existía una denuncia en los Estados Unidos y que el Buró Federal de Investigación (FBI por sus siglas en inglés) participaba, esto fue rechazado por la autoridad tamaulipeca, sólo el consulado de EU en Matamoros había solicitado alguna información, la cual fue facilitada.
El secretario general de Gobierno refirió que los tres jóvenes hermanos tenían como oficio jornaleros que viajaban a diferentes estados de la Unión Americana.
Todo el peso de la Ley: Egidio
Las investigaciones por la muerte de los tres jóvenes estadunidenses en la ciudad de Matamoros llegarán a fondo y se aplicará todo el peso de la ley a los responsables de este hecho, afirmó el gobernador de Tamaulipas, Egidio Torre Cantú, quien confirmó que es la Procuraduría General de Justicia del Estado la que está al frente de las mismas.
Dio a conocer que desde el primer momento en que fue recibida la denuncia por parte de familiares de los asesinados, la PGJE y las autoridades de gobierno se han mantenido atentos en las diligencias pertinentes para esclarecer los hechos.
“Se puso la denuncia en la Procuraduría en la delegación de Matamoros, está al frente la Procuraduría General de Justicia del Estado, (habrá) todo el peso de la ley y cero tolerancia”, dijo.
Desde la aplicación de la nueva fase de la Estrategia de Seguridad Pública en Tamaulipas, por parte del gobierno de la República, existe una sinergia importante con el estado, incluso en la procuraduría estatal se cuenta con el apoyo de la Policía Federal Ministerial, en apoyo a la instancia estatal, en tanto, se fortalece su capacidad operativa, destacó.
No obstante la presencia de Policía Federal en funciones de la Ministerial estatal, es la corporación tamaulipeca la responsable de las indagatorias para localizar a los jóvenes americanos desaparecidos.
Policías plagiarios
Elementos de corporaciones en distintas partes del país se han visto involucrados en levantones:
Caso Iguala
El pasado 26 de septiembre, policías municipales de Iguala y de Cocula, Guerrero, atacaron a un grupo de estudiantes de la Normal de Ayotzinapa. En el ataque murieron seis personas y 43 estudiantes fueron levantados por los agentes. Hasta ayer se desconocía el paradero de los normalistas.
Caso de cazadores
En diciembre de 2010, la Procuraduría estatal de Justicia de Zacatecas confirmó que ocho cazadores originarios de León, Guanajuato, estaban desaparecidos en la Sierra de Zacatecas, quienes habrían sido secuestrados en un retén de policías municipales de Plateado.
Caso colombiano
En septiembre de 2013 tres policías del DF estuvieron involucrados en el secuestro del ciudadano colombiano John Jairo Guzmán Vázquez. Agentes de la Procuraduría General de Justicia del DF detuvieron a dos patrulleros adscritos a la Unidad de Protección Ciudadana Nápoles y al policía preventivo Apolonio Pérez Tapia, quien se encontraba en el lugar de los hechos.
Informe de HRW
Un informe de 2013 sobre desapariciones en México de Human Rights Watch señala que existen evidencias de que 149 de los 249 casos de personas desaparecidas investigados por HRW para este informe constituyeron desapariciones forzadas en las cuales tuvieron participación miembros de las fuerzas de seguridad. http://www.excelsior.com.mx/nacional/2014/10/31/989784#cxrecs_s
