Me manda un amigo un mail con las cuatro fotos que les adjunto y con este texto: «Consulta jurídica. Recurro a tus siempre ilustrados criterios jurídicos para hacerte la siguiente consulta de carácter legal: ¿Es esto una violación estatutaria? ¿O se trata más bien de un error monumental?…»

Le contesto: «Yo me quedé en segundo de derecho (Universidad de Deusto), pero ahí voy:

Creo que, técnicamente, no es una violación, pues me parece que no hay penetración propiamente dicha. Aunque en España, y si el bisonte es hembra, el alce será acusado de maltrato, de machista, de facha y de pertenecer al PP, y ya se puede dar por jodido. No sabe el alce cómo se las gastan José Luis, Leyre y Bibiana.

Por otra parte, si el bisonte es macho la cosa entrará dentro de la más absoluta normalidad e incluso se podría casar con el alce. Gallardón estará encantado de prestar sus servicios y de oficiar la boda, mas que nada para ver si rasca algún voto por el lado de babor. Espe se opondrá rotundamente y será acusada de facha -aunque a mi juicio su postura será la más sensata- y Rajoy se irá de vacaciones para que no le pregunten. Por su parte, Zerolo tendrá uno de sus «orgasmos democráticos».

Además, el alce y el bisonte se forrarán en su gira por los platós de las TVs de toda España y venderán a precio de oro su boda, sus posteriores cuernos -en este caso literales-… y su separación. El alce se enrollará con un jabalí de Cáceres y el bisonte con un mastín de los Pirineos -aunque no es descartable en absoluto un affair con Carmen de Mairena, con Boris Izaguirre, o con el mismo Zerolo- y que el partido de éste salga en tromba a pedir la legalización de los matrimonios entre todas las especies (de momento sólo entre mamíferos, aunque Izquerda Unida, BNG y ERC pedirán que se amplíe a peces, cefalópodos, moluscos, aves y reptiles). El PP se opondrá y PNV y CiU también… hasta la negociación de los próximos presupuestos.

La cosa es que dentro de tres o cuatro años el alce y el bisonte serán tan famosos que incluso se podrían lanzar a la política y hacer mucho daño.

Si además el alce es inmigrante, por ejemplo marroquí o de Burkina Faso, José Luis presentará el acontecimiento como un ejemplo de la integración que conlleva la Alianza de Civilizaciones, y el coito, real o no, será celebrarado por todo lo alto. José Luis lo loará en su discurso a la Asamblea General de las Naciones Unidas y acabará su locución con una de sus frases lapidarias, como por ejemplo: «los polvos no son de los hombres, ni de los alces, ni de los bisontes, los polvos no son de nadie… si acaso del viento». En la ONU habrá desmayos y, al grito de «¡otra vez no!», habrá también desbandada generalizada, empezando por los traductores.

Además si el bisonte es bisonta y tiene 16 años podría abortar sin pedir permiso a sus papás -suponiendo que haya habido penetración, cosa que ya digo que es más que dudosa- así que por ahí puede estar tranquila. Aunque si no está muy segura y tiene menos de16 años siempre puede ir a la farmacia más cercana y obtener sin mayor problema la píldora del día después. Desde luego nadie se extrañará en toda España de que una bisonta menor de edad, con un alce de Burkina Faso por novio, pida la píldora en una farmacia y luego se la tome con unos cubatas junto a sus coleguis en el botellón del parque más cercano, antes de fumarse unos canutitos.

Lo único que no tengo claro de toda esta historia es si en Marruecos o en Burkina Faso hay alces. Por lo demás espero haberte sido de ayuda.

Un abrazo,

E.»