Ingredientes:
300 gr. de arroz.
Una cebolla (unos 250 gr.)
¼ de kilo de hongos o champiñones.
Un decilitro de vino blanco
Un litro de caldo de carne
Un dl. de aceite de oliva.
50 g. de mantequilla.
6 huevos.
Sal.
Modo de hacerlo:Picar la cebolla y con sal, estofarla en cacerola con el aceite removiendo para que tome color tostado por igual. Durante 1/2 hora a fuego muy lento.
Para que no se note al comer hay que hacerla bien con el aceite.
Añadir en ese momento los hongos o champiñones limpios y fileteados, con sal y se rehogan hasta concentrar el caldo que ellos mismos sueltan.
Mezclamos bien el arroz envolviéndolo en su caldo, al empezar como seis cacillos, siempre hirviendo y sin dejar de remover, y dejamos haciendo a fuego lento, removiendo cada poco para que el arroz suelte la fécula y quede cremoso.
Según vayamos viendo que se seca un poco el risotto añadimos más caldo, siempre revolviendo bien. Y cuando se acabe seguimos con agua. Así hasta que esté hecho el arroz, unos 25-30 minutos. Antes de terminar deberemos comprobar el punto de sal y rectificar lo que hiciera falta.
Añadir 25 g. de mantequilla y revolvemos bien para que se integren y adquiera el punto cremoso.
Servirlo recién hecho.
Los huevos moldeados: Se prepara seis moldes flaneros untados con mantequilla.
En cada molde se pone un huevo y encima una bolita de mantequilla.
Se ponen a cocer a baño-maría sobre la placa hasta que empiece a cuajarse el fondo y se mete a horno, en la parte de arriba hasta que el huevo se vea bastante cuajado pero la yema aún blanda.
Retirar del fuego, dejar reposar unos dos minutos y desmoldar.