Debutó anoche Riqui Puig, la joven promesa azulgrana,contra la Cutural Leonesa. Y ciertamente se le vio gran toque de pelota y una especial inteligencia a la hora de situarse en el terreno de juego. Es siempre emocionante asistir al debut de alguien llamado a ser importante. Máxime si es el muchacho que uno ha tenido durante años en la fila de delante en la tribuna del Nou Camp admirando a sus ídolos, que ahora pasan a ser sus compañeros.
(Hay un libro en blanco que se abre, con tantos aciertos que reseñar y tantos errores que evitar. Suerte a la familia Puig en el empeño).