Me lo paso de maravilla viendo cada día capítulos de la serie sobre abogados «Suits» con el añadido de poner los subtítulos en sueco. Es ésta una de las mejores series que nunca he visto. Envidiable su ritmo y excelentes los diálogos acerados, fruto de guionistas muy bien puestos en la labor. Y como trasfondo: la feroz competencia entre abogados, la mitificación del talento que proviene de Harvard (yo estuve allí de visitante y en algunos aspectos no hay para tanto) y la ambición profesional desenfrenada. Pero por encima de todo: actores y actrices de gran talento.
(«Suits» decididamente me alegra la vida).