Son los términos que ya integran mi glosario de la lengua sueca: 4.500 vocablos o expresiones. Cuantificar mis avances me resulta estimulante. Aporta sensación de logro o de consolidación de hábito. Como esos 7 kilómetros al día que intento caminar como promedio y que minuciosamente mide una de las aplicaciones de mi i-phone. Me encanta consultarlo antes de ir a dormir. Da gustirrinín ver la tarea cumplida..
(Alguien dijo que lo que no se cuantifica no existe…)