Llamo y digo:
-Lo siento, debemos cancelar nuestra comida. Me ha salido un imprevisto.
Me contesta:
-Sin problema. Cuando quieras nos vemos. En mi agenda eres grupo A, no grupo C.
Inquiero, extrañado:
-¿Y eso que es?
-A son los amigos. C, los compromisos.
(Así fue el diálogo, así lo transcribo. ¡Hasta pronto, Xavier)