(PD).- La decisión de TVE de pujar por los derechos de la Champions a partir de la próxima temporada trajo polémica. La televisión pública, junto con las autonómicas, emitirá un partido en abierto cada semana, algo que no sentó bien al resto de cadenas privadas.
Como explica Rocío Galván en El Mundo, Luis Fernández, presidente de RTVE, defiende su gestión con números: a TVE, 18 partidos de la Liga de Campeones le han costado 30 millones de euros, mientras que, según Fernández, Antena 3 pagó 29 millones por 13 partidos. Sin embargo, la cadena privada asegura que desembolsó 26 millones.
El presidente de la Corporación no tiene dudas acerca de la rentabilidad de la operación realizada. Fernández desmintió de manera tajante que TVE realizara un puja adicional para hacerse con los derechos de la Champions para las tres próximas temporadas.
«Para ver si podemos realizar una operación tenemos que aunar dos criterios: ver si es interesante o no y ver si salen las cuentas. Cuando estas dos piezas encajan puedes competir. Sino, no». Estas razones, por ejemplo, provocaron que TVE se quedara sin Mundial y Eurocopa.
Las palabras de Fernández parecen una respuesta a las críticas vertidas por Silvio González, consejero delegado de Antena 3 TV, quien la semana pasada calificó de «sorprendente» la compra de los derechos de la Champions por parte de TVE, cuyo coste estimó en 65 millones de euros, por lo que cuestionó el modelo de televisión pública.
Además, González, adelantó que cuando su canal tenía estos derechos, su coste ascendía a 26 millones de euros, con unas pérdidas de un millón por partido. Según sus previsiones, la cadena pública debería afrontar unas pérdidas por partido de dos millones de euros, tras pagar un total de 65 millones.
Fernández también tuvo que salir al paso de las críticas sobre el supuesto coste de la nueva campaña de imagen. «Las cifras que se han publicado son falsas, la campaña ha costado mucho menos de lo que se dice», afirmó el presidente de RTVE, que, además, puso encima de la mesa el coste total de la misma: 750.000 euros.
Respecto a la nueva sede de RTVE, Fernández afirma que en este momento «no es una prioridad» y que «va más lento de lo que me gustaría», aunque señala que en los últimos dos meses se han intensificado los contactos en Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid para determinar el emplazamiento definitivo. El presidente de la Corporación cree que el traslado a la nueva sede se producirá en 2011.
Fernández volvió a hacer hincapié en las cifras al asegurar que la crisis económica no va a afectar a este proyecto, porque «el cambio de edificio no le va a costar ni un euro a los ciudadanos».
El presidente de RTVE abrió el debate sobre cuál es el modelo de financiación por el que se quiere apostar en España. «¿Queremos un modelo como el norteamericano, como el que propone Sarkozy en Francia…? Que se debata y que se proponga en el Parlamento, pero que no se confunda al ciudadano».
En lo que se refiere al futuro del sector audiovisual, Fernández lo calificó de «incierto» debido a la competencia y a la crisis económica. Por esa razón, tendió una mano a las televisiones privadas para que haya colaboración y entendimiento porque, aseguró «somos complementarios».
De hecho, la frase «No somos lo mismo ni hacemos lo mismo» fue una de las más repetidas por el presidente de la corporación durante su intervención.
