Brindis por una Vicepresidenta

Como hoy es el día de la mujer trabajadora, vuelvo a recordar y quizás mantenga la tradición en el futuro, este artículo que hoy reproduzco y que publiqué hace un tiempo en XL Semanal, confiando en que siga de actualidad y que además del mensaje les gusten las recetes de cócteles que incluyo. Ahí va:

Recordé una noche la película Candidata al Poder donde una mujer se presenta como candidata a las elecciones norteamericanas, y me ha parecido oportuno brindar con todos los cócteles del Estado de Ohio que se alzan, o deberían hacerlo, por esta esforzada candidata al poder y por su lucha por la igualdad de la mujer.

La eficaz, obediente e ingenua agente del FBI, transmite a su jefe, a punto de subir a un helicóptero, su confianza en que la mujer llegue a ser pronto igual al hombre. La joven, seguramente trabajando en contra de sus ideas, ha contribuido con su investigación a la destrucción de Laine Hanson, la senadora por Ohio y candidata a la Vicepresidencia de los Estados Unidos de América, que va viendo cómo su ambición se desmorona poco a poco al revelar sus oponentes su pasado sexual.

En esta significativa escena de Candidata al poder, “un thriller sexual situado en la ciudad de Washington”, según la definición del propio director del film, Rob Luire, se expone mucho del sentido final de la película, en donde una brillante senadora por Ohio ve cómo remueven su pasado y le crecen los enanos por el simple hecho de ser mujer y querer asomarse al poder.

A la salida del cine, recordando la odisea de la protagonista (interpretada a la perfección por Joan Allen, quien fue nominada al Óscar a la mejor actriz, por éste su primer papel protagonista), pensé que era el momento de brindar por este esfuerzo, y más hoy que es el día de la mujer trabajadora, por la lucha permanente de la mujer por alcanzar su equiparación a todos los niveles, incluyendo la Vicepresidencia de los Estados Unidos, y hacerlo precisamente con el Ohio, un cóctel nombrado como el Estado al que representa la incansable senadora, y una combinación inicialmente turbia, como el propio pasado de Laine Hanson (sex on laine, haciendo un juego de palabras con sexo on line, la llamaban malintencionadamente en su época universitaria) que se va aclarando de modo progresivo, como el presente de la senadora, mostrado a lo largo de la película y como, esperemos, el futuro del que la película nos priva pero que nuestra imaginación puede prever.

Un mundo despiadado, de lucha por el poder, de zancadillas y corrupción, se refleja en la película. Un mundo que evoca muchas anécdotas reales de los más importantes políticos norteamericanos (los hermanos Kennedy, Bill Clinton) y que muestra una panoplia de variadas bebidas en los locales públicos y en los despachos: buenos vinos, cervezas, refrescos, cócteles, coolers y zumos, se van desplegando por la pantalla acompañando a todo el proceso, a esta candidatura al poder que describe el film.

Todo bajo el amparo de un Presidente, encarando por Jeff Bridges, que no para de pedir que le suban sándwiches y sofisticados platos cada vez que recibe una visita en el Despacho Oval: sándwich de filete de tiburón, pollo chino con nueces, un tipo peculiar de queso que si no lo hay, “habrá que encontrarlo”… Un mundo de caprichos y muy masculino, que la intrépida senadora por Ohio intenta cambiar un poco.

Brindemos por ella, con un Ohio, con todos los cócteles que se toman hoy día en Cincinnati y otras ciudades de Ohio, porque la mujer salga adelante del todo y logre la equiparación en todos los ámbitos. Brindemos, es un decir, por la próxima Vicepresidenta de los Estados Unidos.

Las fórmulas del Ohio. El Ohio tiene una variante para antes y otra para después de cenar, aunque no es recomendable tomar las dos en la misma cena:):

· Ohio para el aperitivo: en vaso mezclador con hielo, verter una cucharada de whisky (queda muy bien con whisky canadiense), una cucharada de vermouth rojo, unas gotas de angostura y otras de Cointreau o triple seco. Revolver, colar y servir en copa de champán alta, completando con cava muy frío. Adornar con una fina tira de cáscara de naranja.

· Ohio para los postres: en coctelera con hielo, verter una cucharada de coñac o brandy (si lo prefiere, también puede hacerlo con whisky), una cucharadita de Curaçao rojo (o Cointreau o triple seco, aunque afecte al color final) y dos gotas de amargo de angostura. Revolver, colar y servir en copa de champán alta, completando con cava muy frío y adornando con una cereza al marrasquino. Se hace en coctelera con el propósito de que se mezcle mejor y también para conseguir un inicial efecto turbio, que se va transformando en una rojiza claridad.

· Ohio Old Fashioned: en vaso Old Fashioned con hielo, sirva una copa de bourbon y unas gotas de angostura, revolviendo ligeramente.

Los cócteles que se toman en Ohio.

Estos son algunos de los cócteles que han estado de moda en los últimos años en los bares del Estado de Ohio:

· The Blues (receta del Night Club Dayton): en coctelera con hielo, verter un sexto de vodka, un sexto de Malibú, un sexto de Curaçao azul (o Cointreau, en su defecto) y un medio de zumo de piña. Agitar, colar y servir con pajita en vaso alto con hielo, adornando con unas cerezas al marrasquino.

· Absolute Sunshine (receta del Pub Canton): en coctelera con hielo, verter un sexto de vodka, otro sexto de vodka al limón, un sexto de crema de banana, un sexto de Curaçao rojo (o Cointreau, en su defecto), un sexto de zumo de naranja y un sexto de zumo de piña. Agitar, colar y servir en vaso bajo con hielo, adornando con guindas y una rodaja de naranja.

· Everglade Slammer (receta del Go Bananas Comedy Club): en vaso alto con hielo servir un medio de vodka, un medio de licor de sandía y un chorrito de jarabe de granadina. Revolver y completar con Sprite o Seven Up.

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Autor

Juan Luis Recio

Blogger gastronómico y de tendencias, crítico de vinos (XL Semanal), letrista, sociólogo, mensista, poeta

Juan Luis Recio

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