Es una ginebra rosa, cuyo nombre está inspirado en los recolectores tradicionales de bayas y fresas ingleses, que a principios del siglo XIX se encargaban de seleccionar y recoger las primeras bayas y fresas de la temporada para las mejores mesas del país.

Les hablo de la ginebra BerryPickers , este es el nombre, que se elabora, según nos informan, con la mejor selección de fresas procedentes del sur de España. El proceso de elaboración se realiza en una destilería artesanal, consistiendo la primera fase en la maceración de las fresas durante cinco días, produciéndose después el proceso de destilación y pasando finalmente al ensamblaje final con alcoholes procedentes de cereales.

La destilería dispone de tres alambiques destinados únicamente a la producción de ginebra, hecho que hace que se pueda garantizar la pureza de cada uno de los ensamblajes y la obtención de las notas de color, olfativas y gustativas deseadas. El color y el aroma a fresas resultante son sin duda los elementos más particulares de la marca. La forma de la botella recuerda a una frasca con un collarín rosa, y, por otro lado, la grafía tiene cierto aire inglés y juega con el negro y el rosa tanto en la botella como en el packaging. Curioso, ¿verdad?