Y lo hace con la presentación desde esta primavera de su Castelo Dolce 2015. Se trata de un monovarietal de sauvignon blanc procedente de una vendimia tardía y 100% natural que se presenta en edición limitada y en botella de 50 cl para preservar toda su frescura.
Y es que Castelo de Medina, una joven bodega de Rueda que ha conseguido situar sus vinos entre los mejor valorados de su D.O. a escala nacional e internacional, ha iniciado una nueva etapa marcada por un cambio radical en la imagen de sus vinos y por la construcción de una gama que destaque tanto por su calidad como por su singularidad. Así, en la búsqueda de ese carácter diferencial, la bodega recupera un vino que dejó de hacerse en la añada 2012, Castelo Dolce, con la intención de potenciar los vinos originales y de edición limitada.
Castelo Dolce 2015 es un vino hecho al 100% con sauvignon blanc procedente de una pequeña finca de tan solo 0,25 hectáreas y recolectado en una vendimia tardía que favorece la fermentación natural de la uva dando como resultado un vino naturalmente dulce, sin azúcares añadidos. Su producción es de solo 2000 botellas que ofrecen una imagen que recuerda a la frescura, atrevimiento, transparencia y originalidad del vino que contienen y que presentan en un formato de medio litro para preservar toda la pureza del vino.
Castelo Dolce 2015 es de un precioso color amarillo pajizo, transparente, nítido y con ligeros toques dorados. En nariz es muy fino, limpio, fresco y elegante con notas de frutas exóticas como plátano, piña y maracuyá. En boca es dulce aunque no empalagoso, sedoso, con un punto mineral y una acidez muy bien equilibrada. En el paladar se muestra estructurado, con una agradable sensación retronasal muy persistente que deja un final redondo y pleno.
Esta primavera-verano Castelo Dolce 2015 se presenta como un aperitivo muy apropiado tanto por su organolepsia y frescura como por su tamaño, más cómodo para llevar en la nevera portátil a la playa, el parque o el barco, por ehemplo… Se recomienda servir a una temperatura de entre 6º y 10ºC y es igualmente adecuado también para acompañar postres ligeros y cítricos de verano o con una comida exótica de países lejanos como la cocina tailandesa o la hindú. Su PVP es de 7 €.
Construida en 1996, Bodegas Castelo de Medina está situada en la localidad vallisoletana de Villaverde de Medina, en el corazón de la Denominación de Origen Rueda, en un edificio de arquitectura tradicional castellana (ladrillo caravista, piedra, forja y madera) que ha sido dotado con la más avanzada tecnología para la elaboración del vino de calidad. Y es que su filosofía productiva se basa en una continúa inversión en I+D aunque “manteniendo por encima de todo los principios tradicionales de elaboración de la zona”.
La bodega cuenta con una extensión de 185 hectáreas de viñedo propio de las cuales 170 están cultivadas con las variedades blancas verdejo, sauvignon blanc, viura y chardonnay, mientras que las otras 15 hectáreas son de tempranillo, garnacha y syrah. Uvas con las que se elaboran siete vinos blancos, dos tintos y dos rosados.
