Gran Cerdo y otros productos de amor al vino

El otro día en Londres en una cena con un grupo de amigos en los bajos de una céntrica iglesia, me topé con una botella de vino que me llamó la atención por su nombre, Gran Cerdo, pero más aún por la explicación que contenía en la misma. Está dedicado, el nombre, a los banqueros y en la etiqueta que figura más abajo pueden ver la explicación más detallada.

En cuanto al vino, dentro de la amplia variedad que produce esta curiosa pareja de elaboradores que responden por la marca The Wine Love, cabe destacar que Gran Cerdo, es la criatura más joven, si bien sale al mercado un año después que los vinos jóvenes de su misma añada. Porque, comentan ellos mismos, «nos da pena sacarlo de bodega y porque la fermentación maloláctica la hace en la primavera del año siguiente a su vendimia, cuando sube unos grados la temperatura del depósito subterráneo de cemento donde duerme y las bacterias lácticas se activan. También la fermentación alcohólica se hace en cemento, con un sistema que tomamos prestado de Oporto, donde los viticultores se meten dentro de los depósitos durante la fermentación y se lo pasan genial, cantando y pisando las uvas con sus pies para ir rompiendo los granos. Nos gustan los vinos ácidos y por ello utilizamos graciano en el coupage con tempranillo si la añada es calurosa.

Y les decía antes de una curiosa pareja elaboradora. Sepamos más sobre ellos:

* Gonzalo Gonzalo nació en Logroño y se crió entre las cepas que sus padres cultivaban en Fuenmayor. Tras estudiar biología en León y enología en la Universidad de La Rioja, se dedicó a viajar por Francia e Italia, donde entró en contacto con pequeños viticultores y elaboradores, descubriendo nuevas variedades de vid y técnicas de elaboración. Tras realizar trabajos de enólogo en bodegas industriales, en 2003 lo dejó todo para dar luz a Orgullo, su proyecto más personal. Es fácil encontrarle haciendo cursos de cata, repartiendo vino en el furgonwine, y sobre todo en los viñedos, donde encuentra la tranquilidad y satisfacción que el trabajo de la viña produce, el saber que la fruta mimada será generosa y el preciado elixir obtenido compensará el esfuerzo realizado. El surf es su otra pasión, siendo creador de las tablas «Pine Box».

* Mar Cambero Azcárate, alias Mar Mota, desciende de una familia de artesanos que confeccionaban grandes cubas de madera en San Vicente. Cursó sus estudios en químicas y enología en la Universidad de La Rioja y trabajó haciendo volátiles, hasta que un día, sin saber cómo, se vio metida en un lago de cemento pisando y cantando. Amante de los vinos finos, elegantes y sutiles, y enemiga de las infusiones de madera, levaduras seleccionadas y ósmosis inversas. Mar Mota es especialmente activa en días que la biodinámica marca como flor. Además es la jefa de diseño y gusta de ser llamada jefa.

Curiosa pareja e interesantes vinos…

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Autor

Juan Luis Recio

Blogger gastronómico y de tendencias, crítico de vinos (XL Semanal), letrista, sociólogo, mensista, poeta

Juan Luis Recio

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