Bellini

Releyendo el interesante libro de Jordi Balló titulado “Imágenes del silencio. Los motivos visuales del cine” (Ed. Anagrama), en el que se analiza el uso en las películas de ciertas imágenes previamente guardadas en la memoria visual del espectador, muchas de ellas extraídas de la iconografía bíblica, recordé que la conocida película de John Woo, “Misión Imposible 2”, se inicia precisamente con una de estas escenas. Podemos ver a Tom Cruise realizando la figura gimnástica del “Cristo” en las Montañas Rocosas, en clara evocación al Cristo de Velázquez o a su posterior versión daliniana. Pero hay también en esta película otra referencia pictórica que podría escaparse al espectador y que tiene que ver con el cóctel que hoy nos ocupa: el Bellini, un cóctel elegante que se mantiene de actualidad tras su creación en los años 40 en el mítico Harry´s Bar de Venecia.

Thandie Newton, protagonista femenina de ”Misión Imposible 2” comparte amoríos en la película con el bueno (Tom Cruise) y el malo (Dougray Scott), pero no comparte con nadie su cóctel preferido, el Bellini, que toma precisamente en el hipódromo, costumbre tradicional del mundo elegante internacional. El Bellini fue creado en 1948 por Giuseppe Cipriani, fundador del mítico Harry´s Bar de Venecia, en honor al famoso pintor veneciano Giovanni Bellini, con motivo de una exposición de su obra en la ciudad. Importantes intelectuales como Ernest Hemingway o el dramaturgo Noël Coward lo degustaron con deleite en el propio local. Y sigue de moda hasta hoy mismo. Como muestra un botón que me sopla mi sobrino David: «en el capítulo 1 de la serie Ray Donovan sale el Bellini y hablan de él». Así que si quieren verlo, ya saben…

Este cóctel sorprende por su aparente sencillez, ya que consta básicamente de zumo de melocotón y champán, pero resulta increíblemente sofisticado y refrescante, como descubrirá usted mismo si se anima a prepararlo. La cantante Madonna, por ejemplo, suele evocar con nostalgia los Bellini que acostumbraba tomar en la casa del modisto Gianni Versace.

En Italia se suele preparar el Bellini con el vino espumoso italiano y aquí, obviamente, disponemos de nuestros excelentes cavas, bebida que no deberíamos relegar a las cenas navideñas, ya que bien fría constituye una excelente alternativa para la época estival o para cualquier estación.

Cómo se prepara el Bellini.

Para preparar el zumo de melocotón, lo más práctico es colocar en una batidora melocotones maduros, pelados y sin hueso, hasta que el puré resultante carezca de grumos. Enfríelo un rato en el congelador. En una copa de cava de tipo flauta vierta una parte de este puré y complete con 4 ó 5 partes de cava muy seco y muy frío. No remueva la mezcla. Adorne con una rodajita de melocotón apoyada sobre el borde de la copa.

· Si quiere experimentar, pruebe una versión exótica sustituyendo el melocotón por mango.

· Puede hacer una versión infantil, el “Falso Bellini”, utilizando sidra de manzana con gas muy fría.

· Si quiere preparar un cup Bellini, ponga en un bol grande con hielo el zumo de tres melocotones maduros (o de albaricoques), un poco de azúcar (o jarabe), el zumo de un limón, un chorro de Apricot Brandy y una botella de cava previamente enfriada. Adorne con unas rodajas de melocotón y sirva en copas flauta ayudado por un cucharón.

Cócteles con Bellini Base de Cipriani

· Bellini Clásico: 3/5 de Bellini Base y 2/5 de Prosecco (vino espumoso italiano).

· Sweet Maggie: 3 partes de Bellini Base y 1 parte de ron blanco, servido en vaso con tres cubos de hielo, una rodaja de naranja y unas hojas de menta fresca.

· Sweet Emi: 3 partes de Bellini Base y 1 parte de ginebra, servido en vaso con tres cubos de hielo y una rodaja de naranja.

· Sweet Annie: 3 partes de Bellini Base y 1 parte de vodka, servido en vaso con tres cubos de hielo y una rodaja de naranja.

El Bellini Base se puede adquirir, entre otros sitios, en la Maison Blanche, en Madrid.

Algunas curiosidades.

· En el Harry´s Bar, en un principio, no se utilizaba batidora para hacer el puré de melocotón, sino que se exprimían con la mano unos melocotones muy blancos de la región de Veneto o traídos expresamente de Francia, pasándose posteriormente por un colador.

* En Maison Blanche, en Madrid, se puede conseguir el Bellini Base.

· En Estados Unidos se suele utilizar una variante del melocotón conocida como H6, que confiere al Bellini un bonito color rosado. Puede conseguir un color similar añadiendo alguna fruta del bosque al batir el melocotón.

· También en Estados Unidos se puede encontrar un raro bitter de melocotón. Un par de gotas esparcidas sobre el cóctel le dotan de una cierta originalidad.

· Para los más prácticos, en Alemania está a la venta un cóctel Bellini ya embotellado, al precio de 14 marcos la botella de tres cuartos de litro. Como solución intermedia, se comercializan purés de melocotón blanco, siendo óptimo el elaborado en el valle de Napa (California).

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Autor

Juan Luis Recio

Blogger gastronómico y de tendencias, crítico de vinos (XL Semanal), letrista, sociólogo, mensista, poeta

Juan Luis Recio

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