«Y más de ciento, en horas 24, pasaron de las musas al teatro». Era el caso del genial escritor madrileño, que paría obras (de una grandísima calidad) como churros.
Lo de Tabarnia, más allá de la coña y allende lo delicioso que es ver a indepes defendiendo argumentos unionistas, me recuerda mucho al caso del dramaturgo español: cómo una idea que surge de repente puede acabar convirtiéndose en una pasmosa realidad (prueba de ello es el nerviosismo de rufianes y puchimitas varios).
Efectivamente, desde una óptica legal, estaríamos hablando no del surgimiento o creación de un Estado propio / República (lo cual jurídicamente es “complicado”) sino, antes al contrario, de una nueva autonomía política dentro del Estado Español: COMUNIDAD AUTÓNOMA DE TABARNIA, aplicando los artículos 143, 144 y 151 de la Constitución (española).
¿Cuál fue el error político-jurídico del “procés”?: el artículo 2 de su Ley de Transitoriedad (lo que yo llamé en su día “EL Izquierdo a Decidir”).
¡Qué de momentos más apasionantes nos esperan!.
Up the Tabarniens!!!!!.
A cuidarse, meus.
PGV.
