Acoso Escolar, el fruto podrido de la LOGSE

CEAPA sigue echando balones fuera ante el acoso escolar

(PD Juan Abad).-Cuando saltaron hace dos años a la prensa las cifras reales del acoso escolar en España, la entonces presidenta de la CEAPA, asociación de padres cercana al PSOE y a la izquierda educativa mas rancia y sectaria ya se descolgó con declaraciones que produjeron estupor en los medios educativos especializados.
«Son cosas de niños», justificaba, añadiendo que «a las asociaciones de padres y madres no les interesa conocer los datos sobre acoso y violencia escolar» y que los motes «siempre han existido y vejaciones de ese tipo no se podían considerar verdadero acoso escolar». Ahora con ocasión de la sentencia del colegio suizo el presidente actual de CEAPA, Pedro Rascón sigue echando los balones fuera respecto a la cuestión que más importa: la defensa de las víctimas.

Propone ahora CEAPA como solución al acoso escolar más de lo mismo, «comisiones de convivencia», «incrementar la participación de toda la comunidad educativa, elaborar «mas planes de convivencia», y «establecer sanciones» eso sí, de carácter educativo y no punitivo».(Ya me gustaría saber, cómo demonios pretenden imponer una sanción «no punitiva»).

Los progres educativos de siempre proponen los remedios «de la abuela» de siempre, es decir la conocida «cataplasma educativa demoprogre»: más dinero, más subvenciones, más «pilla-pilla» presupuestario… todo con tal de «que parezca que se hace algo para que todo siga siendo lo mismo» y de paso llenar los bolsillos de los amiguetes.

La izquierda educativa hegemónica no acepta el fracaso de las políticas educativas que han ensayado en España durante los últimos 30 años. Fracaso escolar, indisciplina, bajo nivel formativo, abandono, profesores sin autoridad… De triunfo en triunfo, hasta la derrota final. Ahora además, tienen que enfrentarse al fruto podrido del acoso y la violencia escolar.

Siguen considerando de manera trasnochada que toda evaluación es un «cancer» y que penalizar o castigar conductas inaceptables de los alumnos es propio de tiempos de «la oprobiosa» dictadura. Quien no evalúa no tiene que darse la mala noticia de que sus programas de convivencia no tienen ninguna efectividad.

La evaluación y la detección tempana de los casos y de las víctimas concretas para protegerlas es la única alternativa efectiva ante un problema como el acoso escolar que tiende a enquistarse y a generar el conocido síndrome de negación en todas las instituciones educativas.

Frente al problema del acoso: «si no sabe aceptar las bromas, márchese del pueblo».

La última consigna emitida desde el Ministerio «Cabrera» es imputar a los padres y a las familias la responsabilidad del fracaso del sistema educativo. Como si los niños fueran a diario a una guerra en la que cada cual tiene que sacarse las castañas del fuego y no a centros educativos que tienen posición jurídica de garante respecto a lo que allí ocurre.
«Si hay niños acosados es culpa de los padres que no educan en casa a los acosadores como es debido», postulan. Así se van «de rositas» todos los que tienen responsabilidades educativas concretas en materia de acoso y violencia.

A los niños victimizados por el acoso escolar y a sus familias, no les queda sino aplicarse la receta de otro conocido progre como fue el humorista Gila quien recomendaba a la mujer a cuyo marido se habían cargado los mozos del pueblo con una «broma»: Señora, si no sabe aceptar las bromas, ¡ Márchese del pueblo…i

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído