(PD).- «Nos conviene aumentar la tensión», le decía ZP a Gabilondo al oído. Pero lo oyó toda España. Lo mismo con las «dos tardes» para aprender economía. Son los indiscretos micrófonos abiertos – Rajoy y su «coñazo» de desfile- los que les juegan malas pasadas. Ahora el cazado ha sido Emilio Botín. El descuido o el azar han dejado en evidencia a la presidencia de la junta de accionistas del Santander cuando, a través del servicio de audio, quedó registrado un insulto del presidente del banco contra accionistas que aplaudían una intervención crítica contra la gestión de la entidad.
Tras la intervención de dos accionistas (habituales en estos actos y cercanos al grupo del fallecido abogado Rafael Pérez Escolar, condenado por el caso Banesto) que se manifestaron contra la ampliación de capital para la compra de Sovereign, se oye en el audio:
«Cabrones, cómo aplauden con éste».
La frase no se oyó en la sala, pero sí en la retransmisión por Internet de la junta, según fuentes de la entidad, que indican que los socios del grupo de Pérez Escolar -que han denunciado numerosas veces al banco sin éxito- suelen acudir a las juntas de accionistas con una clac que aplaude sus críticas.
En otro momento de la junta, se escucha desde la presidencia: «A ése hay que sacarle de aquí (…), que le saquen». La petición se refería a un accionista que insultó y lanzó graves acusaciones contra Botín. Al accionista, identificado como Ignacio Quirós, se le retiró el uso de la palabra tras dos amonestaciones de la presidencia.
