Desde el Atlántico

Carlos Ruiz

¿Por qué nombra Rabat a un tránsfuga saharaui embajador en España?

La noticia, dada como exclusiva por El País, sorprendió a muchos. Mohamed VI va a nombrar embajador en España a un individuo que, no hace ni un año, era miembro de la dirección del Frente Polisario. ¿Qué razones pueden haber llevado a Rabat a efectuar este nombramiento? A mi juicio, puede haber dos razones, alternativas o convergentes en este nombramiento. Intento de explicación.

I. TRÁNSFUGA DEL FRENTE POLISARIO: PROFESIÓN RENTABLE CON EL MAJZÉN
En España se suele recordar, aunque el episodio quizá sea apócrifo, que los compañeros de Viriato, el caudillo lusitano que luchaba contra la ocupación romana de Hispania, le entregaron a su enemigo romano a cambio de la promesa de dinero. Cuando ejecutaron la traición, fueron a cobrar lo prometido ante los generales romanos, pero recibieron una respuesta lapidaria: «Roma no paga a los traidores».
Ni qué decir tiene que el majzén es, desde la perspectiva de la cultura y la civilización, algo bastante diferente de lo que fue Roma. Por ello, no debiéramos extrañarnos de que el majzén sí pague, muy generosamente, a los traidores.

La historia del conflicto entre el majzén y el pueblo saharaui está trufada de estas traiciones. Es muy larga la lista de saharauis que traicionaron a su pueblo para servir al sultán marroquí. Uno de los primeros fue Jalihenna Uld Errashid, que fue el líder del «PUNS» (partido de la unidad nacional saharaui») que meses antes de la invasión marroquí decidió llevarse la caja de caudales del partido y rendir pleitesía a Hassán II. Hassán II y su visir, Driss Basri, se esforzaron en la política de «captación» de tránsfugas o traidores. Y, en esa tarea obtuvieron grandes triunfos. Entre ellos destacaron los nombres de Brahim Hakim (que fue ministro de Exteriores de la RASD), Omar Hadrami (que fue el jefe de la seguridad del Frente Polisario) o Gashmula Bint Ebbi (que fue directora de la Unión de Mujeres Saharauis y esposa de un ministro de la RASD). Todos ellos fueron generosamente recompensados.
Esta política fue continuada por Mohamed VI y se consiguió captar a individuos como Hammati Rabbani (que fue ministro de Justicia de la RASD), Lahbib Ayub (comandante del ejército saharaui que infligió graves derrotas al ejército marroquí) y Ahmedu Uld Suillem (que fue miembro de la dirección del Frente Polisario con responsabilidades diplomáticas en el mundo árabe e Hispanoamérica).
Entre los que rindieron pleitesía al sultán marroquí, sin embargo, como se ha comprobado después, no todos lo hicieron por dinero o venganza. Alguno se vio presionado a la traición por un chantaje. El caso más llamativo fue el del comandante Lahbib Ayub, que pese a haber nacido en Tifariti (en la región del Sahara que controla la RASD), sorpresivamente se pasó a Marruecos para vivir en la zona del Sahara controlada por Marruecos. Allí se dedica ahora al nomadeo de ganado.

II. EL MAJZÉN MANIOBRA CON EL REPARTO DE PUESTOS EN EL «CORCAS»: JALIHENNA CONTRA SUILLEM
El «CORCAS» (Consejo Real Consultivo de Asuntos Saharianos) es el típico órgano propio del majzén. Un órgano absolutamente inútil pero que proporciona numerosas ventajas económicas a sus miembros. Desde que Mohamed VI en uno de sus típicos «anuncios» (en noviembre de 2005) dijo en un discurso que lo iba a «reactivar» se planteó el problema del nombramiento de los puestos directivos. Dicho sea de paso, la eficacia del «anuncio» de Mohamed VI está a la vista. El «CORCAS», cuyos miembros, en su totalidad, son designados a dedo por Mohamed VI, no hace nada salvo propaganda. Pero los puestos dirigentes son políticamente apetecibles por las canonjías que lleva consigo.
Hasta ahora, el presidente del CORCAS fue el «proto-tránsfuga», Jalihenna Uld Errashid. Su mandato concluyó el 25 de marzo.
Algunos en Marruecos le daban por amortizado para el puesto. Antes de haber cazado al oso, algunos vendían su piel. Las especulaciones se desataron cuando en las últimas conversaciones entre Marruecos y el Frente Polisario se anunció que Jalihenna no iba a formar parte de la delegación marroquí, en la que había estado en todas las negociaciones desarrolladas desde 2007. Se llegó a rumorear que Ahmedu Uld Suillem, el último traidor (que fue a rendir pleitesía a Mohamed VI a finales de julio de 2009), fuera a disputar el sillón al «proto-tránsfuga», Uld Errashid.
La candidatura de Uld Suillem se enfrentaba a diversos obstáculos para prosperar. Lo cierto es que en algunos círculos del majzén ya se empieza a dejar caer que Uld Errashid no es tan mal presidente para el CORCAS….
El hecho cierto es que Uld Suillem no va a ser nombrado presidente del CORCAS. Y, quizá por eso, para compensarle por no haberle nombrado lo que algunos decían que le iban a nombrar, se le ha designado embajador de Marruecos en España.

III. ESPAÑA APOYA MÁS AL PUEBLO SAHARAUI TRAS EL EJEMPLO DE AMINATU HAIDAR: EL MAJZÉN PREOCUPADO.
Aquí lo dije y el tiempo me ha dado la razón. Contra lo que algunos quisieron hacer creer, la lucha de Aminatu Haidar estuvo coronada por un éxito rotundo. En este blog dije, el 3 de enero, que la destitución por Marruecos de Omar Azziman como embajador en España se debió a su fracaso en la gestión del caso Haidar. El nombramiento de Uld Suillem como embajador confirma, plenamente, lo que dije en su día.
Uld Suillem es saharaui. Ha sido del Frente Polisario hasta hace menos de un año. Su nombramiento sólo se explica desde la idea de que Marruecos quiere reforzar en España sus tesis sobre el Sahara y para ello ha considerado necesario nombrar a un individuo, Suillem, que por haber sido del Polisario conoce directamente a la mayor parte del movimiento supuestamente solidario que hay en España, lo que podríamos llamar el «oficialismo» solidario.
Uld Suillem no es un hombre que entienda de negocios (al margen de los que pudo hacer con Mohamed VI para pasarse a Marruecos). No es un experto en economía. Es un político. Lo que nos está diciendo Marruecos con este nombramiento es que la anexión del Sáhara no se explica primariamente por cuestiones económicas sino, sobre todo, políticas. Y que España es decisiva para el éxito o el fracaso de la anexión.
Esto pone de relieve algo que muchos en España (especialmente en el entorno del lobby pro-marroquí) no ven, no quieren ver o no quieren que veamos: que la política exterior de España en relación de Marruecos no puede estar definida por los intereses económicos; que los intereses de España son, ANTE Y TODO SOBRE TODO POLÍTICOS; y que el Sahara Occidental dejará de estar ocupado por Marruecos exactamente cuando el gobierno español quiera.

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Autor

Carlos Ruiz Miguel

Catedrático de Derecho Constitucional Director del Centro de Estudios sobre el Sahara Occidental Universidad de Santiago de Compostela

Carlos Ruiz Miguel

Catedrático de Derecho Constitucional
Director del Centro de Estudios sobre el Sahara Occidental
Universidad de Santiago de Compostela

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