Lissavetzky es condecorado con la medalla la Legión de Honor de Francia

Lissavetzky es condecorado con la medalla la Legión de Honor de Francia


(PD).- A Jaime Lissavetzky le gusta el protagonismo y estar donde triunfan los deportistas españoles. El Secretario de Estado para el deporte se apunta el tanto de nuestros deportistas y ayer fue condecorado por su homologo francés Bernard Laporte con la medalla de Caballero de la Legión de Honor en un acto celebrado en la Residencia de Francia en España, en la que se rindió un homenaje a grandes deportistas españoles.

En un encendido discurso, Laporte desgranó no sólo algunos de los éxitos del deporte y de los deportistas españoles, sino las excelencias de la gestión de Lissavetzky.

Laporte, junto al embajador francés en España, Bruno Delaye, llamó ‘ministro de deportes’ en un par de ocasiones a Lissavetzky, provocando la sonrisa en muchos de los asistentes al acto, tras la polémica suscitada por el anuncio de creación de un nuevo Ministerio de Deportes por parte del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Tanto Delaye como Laporte hablaron de su «sana envidia» y «del orgullo» que les embargaba «como europeos» de los triunfos de los españoles y de la «excepcional vitalidad del deporte español en estos momentos».

El secretario de Estado español, tras ser investido con la medalla acreditativa, agradeció en no menos elogiosos términos la actitud de Francia para con él y con el deporte en general, ensalzando la colaboración existente entre los dos países en todos los ámbitos y en especial en la lucha contra el dopaje en el ámbito deportivo.

Lissavetzky explicitó su «agradecimiento y homenaje a la actual generación de deportistas» y no atribuyó a la casualidad que le concedieran la Legión de Honor precisamente en este momento, «tras el mejor año en cuanto a resultados de la historia del deporte español». «Esta generación de deportistas ha roto los límites establecidos. Han llegado más lejos que nadie sin temor a buscar nuevos caminos y han conseguido que la sociedad se sienta orgullosa de ellos», dijo.

«Estoy inmensamente agradecido y feliz», dijo ya luciendo la medalla de la Legión de Honor en la solapa. «No hay que tener vergüenza de ser feliz», finalizó Jaime Lissavetzky.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído