Abellán destapa la corrupción en el Bernabéu

Abellán destapa la corrupción en el Bernabéu


(PD).- Un ataque a pecho descubierto y a quemarropa. Eso es lo que ha hecho Abellán y su equipo de la Cope a Ramón Caldrón. Un trabajo de investigación en el que muestra que el Madrid vende entradas de manera alegal. El director de Deportes de la cadena de emisoras destaca, además, las dos maneras para adquirir ciertas localidades: las conseguidas de manera «legal» tienen referencia del coste de la entrada y el IVA añadido; las «alegales», además de especificar de manera bien clara que «no son aptas para la venta», no reproducen ni el coste de la entrada en cuestión, y no registran el IVA. Otro problema para Calderón antes de la asamblea.

El negocio que ha destapado el programa «El Tirachinas» que conduce y dirige José Antonio Abellán es muy simple. Se revenden entradas destinadas a protocolo que corresponden a localidades de Palco VIP (los denominados Box) por un precio astronómico.

Después, se procede a ingresarlo directamente en una cuenta a nombre de la empresa de Marketing y eventos “Il Consigliere”. Hasta este momento no se conoce ningún acuerdo o contrato entre esta empresa y el Real Madrid, por lo que se entiende que el club blanco no recibe ningún beneficio de la operación.

Además, según ha desvelado Abellán, la misma empresa se encarga de explotar el Santiago Bernábeu para fiestas, celebraciones, reuniones o lo que el cliente desee.

Una conversación telefónica que responde a una llamada a esa empresa, cuatro vídeos que atestiguan y corroboran las informaciones sobre el negocio existente con esos palcos, así como una factura emitida por la citada empresa y las correspondientes entradas para el partido Real Madrid-Bate Borisov.

Según «El Tirachinas», existen dos métodos para la compra-venta de entradas a través de estas empresas que trabajan con el Real Madrid. Si la entrada se paga con factura, se produce un encuentro en un hotel céntrico de Madrid. En caso de que la compra sea en dinero «negro», al comprador se le informa del modelo y matrícula de un vehículo estacionado en una calle concreta, a una hora señalada. Allí se lleva a cabo la entrega. El comprador paga, y si tiene el dinero en efectivo, se le facilita su entrada. Abellán aporta toda una serie de vídeos con cámara oculta donde se corroboran estas informaciones.

La informaciones de Abellán marcan una clara diferencia entre las entradas compradas de manera legal y las adquiridas de modo «alegal». Las entradas conseguidas de manera legal tienen referencia del coste de la entrada y el IVA añadido. Las entradas «alegales», además de especificar de manera bien clara que «no son aptas para la venta», no reproducen ni el coste de la entrada en cuestión, y no registran el IVA.

En el fútbol existe un sistema de control de accesos, mediante el cual puede conocerse de primera mano todo lo relacionado con la entrada adquirida. Cómo se ha vendido, cuándo, a quién, en qué momento y a qué hora ese cliente ha entrado en el estadio. Sin embargo, en ese registro no consta el dinero pagado para adquirir dichas entradas, tal y como se puede apreciar en el documento aportado por Abellán y su equipo

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