(PD).-El niño mimado de la Fórmula 1, Lewis Hamilton parece que le da miedo que se creen grandes expectativas entorno a él, y por eso se cubre las espaldas y dice «no estar seguro de querer ganar todo lo que ganó Michael Schumacher» a su regreso a la fábrica de su equipo en la ciudad inglesa de Woking, en la que celebró el título mundial con los suyos.
«Siempre se puede mejorar. Quiero seguir ganando carreras y campeonatos de Fórmula 1, pero no estoy seguro de querer ganar todos los Mundiales que ganó Michael Schumacher. Aunque me gustaría ganar más, eso no es lo que me preocupa todavía», aseguró el británico al paso de las comparaciones con el legendario piloto alemán.
Su estelar inicio de carrera en los monoplazas, con un título mundial y un subcampeonato en tan sólo dos años, han alimentado las comparaciones con Schumacher. Y es que, a sus 23 años, tiene en su mano poder igualar lo que consiguió el germano a los mandos de Benetton y Ferrari.
A pesar de todo, Hamilton mantiene los pies en el suelo, y aprovechó la ocasión para agradecer a su equipo la ayuda que le han prestado para proclamarse campeón mundial. «Son ellos los que te llevan. Sientes que tienes que estar a la altura del esfuerzo que hacen», afirmó el británico.
«Son ellos los que te llevan, no sólo por el apoyo que te dan, sino porque no les quieres decepcionar. Sientes que han trabajo muy duro para ayudarte y tienes que estar a la altura de todo ese esfuerzo», admitió el joven conductor de McLaren en su regreso a la factoría Mercedes.
«Regresar a casa después de ganar un título mundial ha sido una experiencia increíble. Creí que sólo sería presentarme allí y pasar el día, pero desde luego que no esperaba sentarme en el coche y encontrarme allí a todo el equipo», confesó el campeón más joven de la Fórmula 1 en declaraciones al diario ‘Woking News and Mail’.
