José María Calleja: «Que ahora se plantee la memoria no tiene que entenderse como un arma arrojadiza»

José María Calleja: "Que ahora se plantee la memoria no tiene que entenderse como un arma arrojadiza"

Miguel Pato y Tatiana R. Brito (PD)-. Más de treinta años después considera que ya va siendo el momento para dar una explicación democrática al Valle de los Caídos. Una necesidad que José María Calleja defiende del mismo modo que afirma que “a quien le molesta la memoria es porque, tal vez, tiene algo que ocultar”.

¿Hemos conseguido ser una España?

Deberíamos conseguirlo. La memoria no tiene que molestar a nadie. Una vez que se termina la Guerra Civil no se abre un proceso de reconciliación sino una dictadura que dura 40 interminables años con sus días y sus noches.

En el prólogo de su libro “El valle de los Caídos” (ed. Espasa) se afirma que “la dictadura de Franco continúan persiguiendo nuestro presente”.
El miedo sigue aun vigente. Es evidente que Franco murió en 1975 pero la dictadura o sus consecuencias están todavía presentes en algunas almas.

Durante la visita que realizó al lugar para la redacción de libro confiesa, de hecho, que aquel lugar da miedo.

La estética es imposible de recuperar, aquello da miedo. Es una estética “tenebrante y tenebrista”.

Al visitante, que puede ser una persona extranjera por ejemplo, ¿cómo se le presenta aquel lugar a través de las guías?

Se les presenta como un monumento totalmente despojado de la simbología. La sensación que da es que aquello fue edificado a mayor gloria de un señor que debió de ser estupendo. La explicación que se da es, a mi juicio, pre-democrática.

Pero las explicaciones pertinentes de cuál fue el origen y motivo de aquello, ¿realmente cree que aun no se han dado?

Por lo poco que valoran algunos las libertades parece que no dan cuenta de que hubo una dictadura en la que luchar por la libertad te llevaba a la cárcel.

¿Por qué es tan difícil colocar en el lugar una placa o monumentos en homenaje al otro bando de la Guerra Civil y “aquí paz y después gloria”?

Parece difícil porque después de más de 30 años tras la muerte del dictador no se ha hecho.

Aquel edificio no hay que volarlo, en absoluto, hay que mantenerlo (aunque sólo sea por las personas allí enterradas) y tendría que haber una explicación democrática.

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